CRONICA

De viaje a la felicidad.

Me despierto, de malgenio como siempre pues desprecio madrugar, pero no hay otra opción

Me baño, desayuno, voy rumbo a mi colegio me deja la ruta, como si fuera raro no hay nada más por hacer, es un día importante no debería faltar llego al colegio.

Estoy ya a pasos del colegio, pero siento un vacío. No recuerdo haber empacado el permiso del paseo

Busco en mi bolso con suma delicadeza pero es inútil allí no está.

Una rabia crece en mi interior pues es totalmente mi culpa

- Empiezo a buscar soluciones.

No me queda más remedio que llamar a mi casa.

Estoy seguro de que mi madre no iría al colegio solo para entregarme ello, aun así debería llamar, tal vez mi hermana si este, eso arreglaría las cosas.

Me dirijo a secretaria… Sorpresa aún no ha llegado, tomo el atrevimiento de aun así entrar y llamar, supongo que la desperté pues me contesto de la peor manera.

La escucho dos horas alegar, pero al final me dice que no, no está ni allá ni acá, en donde podrá estar

Me preparo para recibir todo un día de clase con otro grupo

A estar solo en medio de personas con las que poco me relaciono

Me he echado al dolor, no hay nada más que pueda hacer

Saco de mi bolso, una gaseosa, la cual estaba destinada para aquella salida en la cual ya no asistiría

Pero cuando me dirijo a guardarla siento un pequeño papel doblado, me emociono y lo saco, sorpresa, era el permiso, justo cuando ya todos estaban por salir, los alcanzo y me regañan por demorado y no haber estado allí antes, ellos no saben por lo que anteriormente había pasado.

Me entero de algunas cosas como que Nora nuestra directora no asistirá, y que en cambio nos acompañaran el profesor Julián y la rectora.

Después de un par de recomendaciones, partimos.

Fue curioso, el bus en que viajamos fue el mismo que me transporta siempre o bueno cuando no me deja.

El ambiente en el bus es genial, todos están emocionados me incluyo en ello .

Los paisajes de nuestra ciudad son hermosos me siento afortunado de poder presenciarlos

Todos tiene expectativas diferentes para este viaje, a todos nos surge la pregunta de si podremos o no meternos al agua espero no, úes no me gusta el agua fría

Me encantaría perderme en el bosque, no por mucho tiempo

Contemplar los olores, los colores, el aire puro, sentir con mis pies descalzos la hierba darle forma a las nubes, recordar que también soy parte de esto.

En el bus, este es mi continuo pensamiento

Llegamos al Parque Arvi, vemos como el clima cambia y el paisaje es diferente, se respira aire puro.

Es hora de abandonar los buses y comenzar con nuestra aventura todo mi grupo y yo nos reunimos en una zona verde, esperando las indicaciones del profesor, antes de empezar debemos hacer un calentamiento junto a los grupos de séptimo y sexto pues la caminata era larga y esto evitaría que nos doliera el cuerpo. Mi grupo fue el último en salir la caminata empezó por era transitar por una carretera, allí veíamos tuvimos la necesidad de todos caminar en fila india pues no había será y esta era la mejor manera de evitar accidentes Todos debíamos ir a un paso moderado para evitar la fatiga, abandonamos en pavimento y es hora de aventurarnos por el bosque y ver las maravillas que este posee, hace mucho frio en este lugar, estamos en medio de árboles gigantes

Allí hubo un momento de risas y pudimos compartí con la naturaleza, abrazando árboles y caminar sin zapatos entre las plantas, esta experiencia fue única pues me transmitió paz y tranquilidad.

Caminamos por unas cuantas horas, en medio de risas caídas y millones de emociones

Al terminar la caminata , todos nos digerimos hacia un lugar llamado la olla en el cual podíamos nadar cosa que por obvias razones , no hizo , junto a varia amigos y amigas , decidimos jugar , captura la bandera un divertido juego que empezamos a principio de año , había un lugar gigante en el cual podíamos ser libres sin ningún peligro

Ese día fue, estupendo