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FE CRISTIANA Y COMPROMISO POLITICO Alicia de Sa Torres Buenos Aires, Sábado 21 diciembre de 2013 Año 38. Nº 620. Costo de impresión $ 7 ¡POCHO VIVE! IGLESIA: NACER DE NUEVO, ES LA conDICIÓN QUE TE PIDE JESÚS 13 Soñar con lo posible Betty Bosso NAVIDAD 14 5 Comunicación fraterna Bernardo Hugues c.p.

Diciembre 2013

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Page 1: Diciembre 2013

Revista Santa Cruz. diciembre 2013 - 1

FE CRISTIANA Y COMPROMISO POLITICO

Alicia de Sa Torres

Buenos Aires, Sábado 21 diciembre de 2013 Año 38. Nº 620. Costo de impresión $ 7

¡POCHO VIVE!

IGLESIA:

NACER DE NUEVO,

ES LA conDICIÓN QUE TE PIDE JESÚS

13Soñar con lo posibleBetty Bosso

NAVIDAD

145Comunicaciónfraterna

Bernardo Hugues c.p.

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3. NAVIDAD: LA NECESIDAD DE NACER DE NUEVO- Fernando Pose

8. ¿COMO NACIÓ LA CANCIÓN “HAY QUE SEGUIR ANDANDO, NOMÁS”?- Carlos Saracini c.p.

ESCRIBEN EN ESTE NUMERO- noviembre de 2013.Alicia de Sá Torres, P.Bernardo cp.,Betty Bosso, Miguel Egan, Luisa Fankhauser, Gerardo Girón, Sandra Hoj-man, Carlos Juliá, Alba Lanzillotto, Francisco Murray, Norma Paredes, Fernando A. Pose, Ariel N. Santa-nera, María Inés Santanera, Carlos Saracini.

Enriquecimos nuestra mirada con el artículo de Leonardo Boff (de Koinonía)

DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN: Gabi Incola y Cristina HereñúADMINISTRACIÓN, DISTRIBUCIÓN Y PUBLICIDAD: Leandro Barreiro, Roberto Camiolo, Isabel Denti, Jorge Nazer, Gastón Ortiz, Coca Taudien, Celia L. Vera.

Suscripciones: [email protected]

EDITORIALEl almanaque nos despierta y nos recuerda que ya estamos en una nueva Navidad. Es una buena noticia porque muchas veces con sus encuentros, sus imágenes, nos hace recordar vivencias trascendentes: no le toca nacer a Jesús, nos toca nacer a nosotros. Es por eso que la tapa y la nota de Temas que Queman, nos recuerdan que para ver el Reino de Dios debemos nacer de nuevo. Buscar quizá otras opciones, cambiar actitudes, perdonar al que quizá hace tanto he separado de mi corazón… Pero además en la otra dimensión, como Iglesia, también somos llamados a nacer de nuevo. Ser ese viento que no sabemos de dónde viene o a donde va pero que acaricia nuestro rostro o empuja nuestras espaldas para tomar opciones valientes y fraternas. Debemos cambiar mucho de tantos años de oscurantismo, pero el Evangelio es un camino seguro a seguir.Una noticia no tan buena es la constatación que nuestra sociedad padece tensiones de muchos tipos y que se expresaron últimamente en los saqueos, en la demencial actitud de la policía y la incapacidad de los gobernantes para prevenir situaciones de riesgo que muchos alertaban. Hay para los analistas condimentos de todo tipo, de los cuales no se puede excluir al narcotráfico. Un tema realmente serio. Reconstruir el tejido social es un camino largo pero no imposible en la medida que el objetivo no sea el “poder” sino la “fraternidad”. Queremos antes de cerrar este editorial con un recuerdo especial para el papá de Cristina Hereñu que vivió su pascua hace unas semanas. Un abrazo grande a Cristina y a su familia.Nos despedimos con este número hasta marzo del 2014, en que como todos saben otro equipo se hará cargo de la coordinación de la Revista.A todos nuestras gracias más profundas, al Señor que nos acompaña siempre y deseamos que se traduzcan todos los buenos deseos en el saludo de una ¡FELIZ NAVIDAD!

Hasta la próxima.

4. El espacio de Alba/ 6.Gracias totales /7 En la escuela del Resucitado/10. Y a Ud. ¿Qué le parece?/11. Al nacer Jesús/ 12.Brújula política /16. Entremeses-Cortitos/ 18. La magia del espectáculo/19. AA Grupo Santa Cruz/20. El significado de Mandela para el futuro amenazado de la humanidad/ 21. Nos escriben/22. Palabras de Maestra/24. Descalzos en el terreno sagrado de la memoria

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Revista Santa Cruz. diciembre 2013 - 3

ESCRIBEN EN ESTE NUMERO- noviembre de 2013.Alicia de Sá Torres, P.Bernardo cp.,Betty Bosso, Miguel Egan, Luisa Fankhauser, Gerardo Girón, Sandra Hoj-man, Carlos Juliá, Alba Lanzillotto, Francisco Murray, Norma Paredes, Fernando A. Pose, Ariel N. Santa-nera, María Inés Santanera, Carlos Saracini.

Enriquecimos nuestra mirada con el artículo de Leonardo Boff (de Koinonía)

DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN: Gabi Incola y Cristina HereñúADMINISTRACIÓN, DISTRIBUCIÓN Y PUBLICIDAD: Leandro Barreiro, Roberto Camiolo, Isabel Denti, Jorge Nazer, Gastón Ortiz, Coca Taudien, Celia L. Vera.

Suscripciones: [email protected]

Muchos de nosotros recordamos ese encuentro de Jesús con Nicodemo, maestro religioso. Es un diá-logo lleno de sutilezas que Juan lo “transcribe” en su capítulo 3, 1-9 y ss., en él Jesús pone como condición para ver el Reino de Dios “nacer de nuevo”. Hoy no estamos como Nicodemo que lo recibió sin espe-rárselo, lo hemos leído muchas veces y quizá escu-chamos alguna reflexión sobre el mismo; pero como todo texto evangélico tiene una riqueza que puede aplicarse a situaciones diversas.Hoy podemos decir que sigue tenien-do su exigencia a nivel personal pero lo podemos extender a otros ámbitos como puede ser el de la Iglesia.Decirle y decirnos: Iglesia tenés que nacer de nuevo si querés ver el Reino, aun más, si querés ser un anticipo de él, constituye un desafío y un sueño que los cristianos que vivimos el Con-cilio todavía esperamos. Más aún, el Concilio ya quedó en parte desactua-lizado porque la dinámica humana en la ciencia, la tecnología, la moral so-cial, etc. demanda cada día una res-puesta nueva.Nacer de nuevo, ese sueño podría tomar algunas acciones concretas:

* Desarmar la estructura de la Curia Romana.* Desandar caminos de dogmas hechos a medida de circunstancias pasajeras.* Volver a la sencillez y la pobreza, haciendo de toda acción pastoral una opción clara por los pobres.* Reconciliarnos con la ciencia y la tecnología.* Destrabar los restos de autoritarismo clerical e in-corporar plenamente a los laicos en la conducción de la Iglesia. En este punto especialmente se debe

mencionar a las mujeres, a las cuales se les da la ta-rea de preparar a nuestros hijos en la catequesis (el primer anuncio) y luego son ignoradas en la estruc-tura de decisión. * Valorar la piedad popular auténtica que excluye todo tipo de paternalismo.* Impulsar en la diócesis la creación de comunidades eclesiales de base o de otras formas en la que los cristianos puedan vivir la cercanía de la fraternidad.

* Definitivamente decirle al mundo que no tenemos catecismo, tene-mos evangelio. Que no tenemos Ley tenemos Bienaventuranzas, es decir esperanza y alegría.* Ir incorporando a los cristianos lejanos a occidente para aprender de ellos nuevas formas de vida.

No seguimos más. Podríamos lle-nar varias páginas .Lo que consuela en estos mo-mentos es que pareciera que nace una nueva Iglesia en Santa Marta, donde el obispo de Roma está como pasajero del hotel.

Llegamos a la Navidad el 2013 y nos vamos a extasiar con el niñito que viene, pero en ese mirada debería-mos incorporar la fuerte convicción y la profunda oración de que tenemos que nacer de nuevo. Que es una oportunidad más y para la Iglesia a la cual nos hemos referido especialmente, es la gran opor-tunidad para que podamos vivir todos las utopías de Jesús.

Feliz Navidad.

Fernando A. [email protected]

Navidadla necesidad de nacer de nuevo

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por Alba Rosa Lanzillotto

AMOR versus CONSUMISMO

Parece mentira , ya estamos a un paso de Navidad. El año voló. Recuerdo, cuando era pequeña solía repe-tir una canción que decía “ Es el tiempo un tren que pasa sin pararse a descansar”. La verdad, este año pasó como un tren, pero un tren bala. Llega la Navidad, la fiesta del amor, del nacimiento de Jesús quien nos enseñó y nos enseña a amar. Hoy, la TV--que a veces, gracias a Dios , también habla de la vida---.nos mostró una beba prematura que al nacer pesaba 700 gr. y cabía en la mano de su mamá. Por obra de los imprescindibles cuidados médicos y de la ciencia, y todo ello abrazado por el amor de su madre cuya mirada a través del cristal de la incubadora .era un mensaje de ternura y fuer-za, salió adelante. Y así con tanta asistencia y tanto amor fue creciendo hasta ser ahora una hermosísi-ma beba derrochando vida y alegría .Qué hermoso, qué navideño, cuan hondamente humano.

Al ver las imágenes y apreciar cuánto hizo la ciencia y la atención de médicos y enfermeros para lograr este casi milagro, no pude menos que pensar. en aquel bebé QOM, también prematuro. Si él hubiera sido atendido de igual manera, en lugar de inten-tar darle calor con reflectores , estufa y frazada para “ayudarlo” a superar su extrema fragilidad,, si con él se hubiera manifestado el mismo desvelo de los res-ponsables de su atención, en lugar de terminar con sus entrañas quemadas, seguramente hoy estaría vivo y podríamos decir lo mismo, Qué hermoso, Qué hondamente humano., Qué navideño. Pero no fue así .Ya llega la Navidad- y me trae otro recuerdo. En Es-paña se hacía la siguiente propaganda : La Navidad está en Galerías Preciados o en El Corte Inglés.. Y no-sotros, en la Parroquia del Dulce Nombre de María, no sabíamos cómo hacer entender a los fieles, que el Buen Dios no anda por esos sitios, que si no está en el corazón de cada uno, no está en ninguna partePorque es aquí ,en nuestro corazón donde Jesús debe, donde Jesús quiere nacer cada día..El sabe que esa es la única manera posible para el ser humano,

de nacer a una vida nueva, de iniciar el camino de la construcción en sí mismo,del hombre y la mujer nuevos que el mundo necesita para vivir plenamente y no sólo sobrevivir entre ajustes y mentiras, entre la fastuosidad que producen las excesivas riquezas de unos y el hambre y la miseria de los otros; entre el lujo y la desnudez; el despilfarro y la escasez. .En Navidad lo único digno de ser consumido, y al mismo tiempo ofrecido, es el amor y con él y por él el encuentro, los abrazos. un te quiero callado du-rante mucho tiempo, la risa sana, el recuerdo amo-roso de los que no están presentes físicamente, pero sentimos cercaLa Navidad es un faro de luz que al mismo tiempo ilumina lo más bello de la existencia y también las miserias humanas, los egoísmos, la indiferencia.Queremos ser cristianos, seguir, las huellas de Jesús , Dios, hermano, amigo. A pesar de nuestras manifies-tas fragilidades, hacemos el esfuerzo por ponernos de pie y “seguir andando” por el camino que en su vida y con su muerte nos marcó. Hondamente sen-timos el inmenso anhelo de llamarnos, cristianos, sólo cristianos, de Cristo, del Dios eternamente jo-ven que nos habla con el lenguaje de nuestros días y nos enseña a interpretar la realidad actual a la luz de su Evangelio, eternamente joven, como Él. Nos sabemos hijos de ese Dios que no habita en pala-cios, ni posee decenas de departamentos, campos y riquezas, mientras millones de sus hermanos, sólo tienen el cielo por techo. Ese Dios para quien el pe-cado por excelencia es todo cuanto hiere, ofende o hace infeliz a alguien.Ese Dios que nos exhorta a ser servidores. Ese Dios que nos ama y nos exhorta a amarnos. Ese Dios es el que nace en Navidad, pero no en un palacete ni en las vidrieras llenas de luces y precios desquiciados,. , sino en el corazón, ese lugar pequeño que puede hacerse grande en la medida en que se multiplique en acciones fraternales.No nos llenemos de regalos, no nos dejemos derro-tar por el consumismo, un vicio generador de dife-rencias. Llenémonos de amor, y procuremos que florezca y dé abundantes frutos. Que así sea!!!.

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Revista Santa Cruz. diciembre 2013 - 5

Comunicación fraterna

Fernando:(para los integrantes de la Revista) Todos los meses, fielmente, llega tu circular re-cordándonos el próximo número de la Revista Santa Cruz. Siento necesidad de decirles algo al registrar la marca 80 en la lista de años transcu-rridos. Tuve el privilegio de coincidir con muchos de ustedes que llevan el apellido “Santa Cruz”. Us-tedes fueron compañeros, amigos, hermanos... Nos tocó un tiempo borrascoso, a veces violento, lleno de esperanza y algunas veces traspasado de dolor. Soñamos una Iglesia viva, apasionada por Jesús y necesitada de vínculos reales con los her-manos.Llegué “verde” y Santa Cruz me recibió como era. Tuvieron la paciencia para acompañarme. Pocas “certezas pastorales” guardaba mi maleta. Cuando todos tiramos sobre la mesa los “sueños” constata-mos que los horizontes se ampliaban, y los aportes de cada uno alimentaban esperanza. Creo que lo bueno fue la alegría, la creatividad... La fiesta formaba parte de la vida...Veo que han crecido, las iniciativas nuevas en pos de respuestas a preguntas provocadoras susci-taron la imaginación, la Revista bien podría ser la síntesis de este camino.Vayan mis felicitaciones y un “GRACIAS” grande. Me han tratado con benevolencia y los siento her-manos. El testimonio de fidelidad a Jesús a lo largo de años, a veces con momentos difíciles como en-fermedad, pobreza, ausencia de seres queridos. Esa capacidad de seguir sonriendo, espantando la tristeza o la amargura que rondan siempre, dibuja en rostros marcados por los años signos de ternu-ra, bondad, alegría.Simplemente: ¡gracias! Los abrazo a todos.

Bernardo cp

Bernardo: hermano, amigo y maestro.

Deseo contestarte las palabras generosas con que te referís a nuestra tarea en la Revista. Yo también pienso en “mil” nombres que quedaron registrados en el tiempo y que hoy por diversas razones –que no excluye el haber vivido su pascua-- ya no están y que son parte y artífices de la construcción de nuestro proyecto.Te responderé y no sé si bien, en nombre de to-dos.Jesús en una de sus parábolas nos dice “que una vez que hemos hecho todo lo que teníamos que hacer, debemos decir: siervos inútiles somos, hemos hecho lo que debíamos”. Es un texto que siempre me pegó fuerte porque es la pura verdad: ¿cómo llegamos?, ¿cómo nos mantuvimos durante tantos años?, ¿cómo seguimos a Jesús, en mi caso de bastante lejos?, es un misterio. Es un llamado a veces irresistible y al ser de tal magnitud poco queda de mérito para aquel que lo siga.También cuanto cariño hemos recibido en la co-munidad que nos alentó y sostuvo y sobre todo en momentos en que casi en soledad, con Ariel, Ricardo, y Nené, decíamos al terminar cada pu-blicación: ”otra más”… y hoy vamos por la número 620 y contamos con unos treinta redactores… al-gunos un tanto remisos como vos.Es una alegría haber festejado tus ochenta con la comunidad con la cual creciste y dejaste crecer. Es una comunidad fuerte y adulta, libre de clerica-lismos y llena de vida. Vos tuviste mucho que ver. Tus silencios oportunos, tu pasar desapercibido, tus comentarios al pasar, tus broncas calladas o reparadas, dieron el fruto del crecimiento de los demás.Te siento hermano, amigo, maestro. Jesús decía que no había que llamar a nadie maestro, a no ser que lo fuera… el se refería a otros doctos…La Revista recorrió casi toda tu vida en la comu-nidad y ella a través de sus redactores dio cuenta siempre del cariño que te tenemos. Un abrazo. Fernando

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¡¡¡GRACIAS TOTALES!!!

Al equipo de “los mayores de la Revista Santa Cruz”…

Lo hago en nombre de los religiosos Pasionis-tas… en particular de uno de los inspiradores, Mateo Perdía… que desde el cielo debe estar contento.Lo hago en nombre de los hermanos/as de las diferentes comunidades Pasionistas, de Metan, Juárez, Montevideo, Caroya, y otros “pasionistas” que están en diferentes lugares donde llega la revista.Y… también lo hago en nombre de los herma-nos/as de la Manzana Santa Cruz…

¡GRACIAS!Por haber sostenido un espacio plural en la línea de lo que impulsó el Vaticano II… una Iglesia Pueblo de Dios, hoy decimos de esta manera: Una iglesia de “Discípulos/as de Jesús” en un plano de igualdad, con una fe adulta, confiada, creativa y lúcida.

¡GRACIAS!Por crear un espacio donde muchos pudimos ir aprendiendo a pronunciarnos… a compartir búsquedas, convicciones y sueños. Claro que les hubiera gustado que haya más partici-pación. No es un dato menor que una de las que se sumó en estos últimos años, Sandra Hojman, haya escrito un libro con las refle-xiones que nos iba regalando a través de la Revista, animada por una editorial de España. A mí la Revista me ha desafiado a compartir

lo que siento y pienso, por eso gracias. Sé que a otros les ha pasado lo mismo.

¡GRACIAS!Por esa mirada atenta a las otras comunidades pasionistas. Otra vez, siempre esperando algo más que llegue desde esas comunidades… hasta el final no perdieron la esperanza de una mayor participación. Igualmente de parte de ustedes la preocupación de que les llegue la Revista. Soy testigo que en esas comunidades muchos la esperan con alegría y agrade-cimiento.

Y… ¡GRACIAS! Por saber cuándo se termina “un ciclo”. No es fácil saber cuando se termina un ciclo, saber pasar “la posta” a las nuevas generaciones. Esa es una de las cosas que me alegran de Bernardo; él supo cerrar un ciclo en Santa Cruz y junto con la comunidad abrir un ciclo en “San Cayetano” (Campana). Ahora se dio cuenta que cerraba el ciclo de San Cayeta-no y el año que viene, se va a abrir un nuevo ciclo en Juárez (Formosa) junto a Marcelo cp y Eduardo cp.

Eso tiene que ver con la sabiduría. Así los veo en Fernando, Jorge, Ricardo y Ariel, que cierran este ciclo; confiando a las nuevas generaciones.

Por eso… ¡GRACIAS TOTALES! Queridos hermanos.

Los abrazo, Carlos cp

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Revista Santa Cruz. diciembre 2013 - 7

Miguel Egan, [email protected]

Al inicio de su ministerio público, Jesús se rodeó de un grupo de 12 discípulos, comúnmente llamados “Los Doce Apóstoles”. Estos tenían por misión acom-pañar a Jesús en sus giras de predicación; y tratar de recordar lo que Jesús hacía y enseñaba. Para que un día, después de la Resurrección, pudieran salir por los caminos misionales del mundo proclamando la Buena Noticia de Jesús. No se les pedía que escribie-ran, sino que recordaran. Pero ¿entendían todo lo que veían y escuchaban? Obviamente no, pues la personalidad de Jesús humana-divina que ningún hombre o profeta entrevió, los desbordaba. Pero Jesús sabía que un día entenderían, cuando les ofre-ciera la Clave de lectura e interpretación para releer y entender no solo todo lo que hizo, enseñó Jesús en su vida pública, sino también para interpretar todo lo que los profetas escribieron sobre Jesús.Pero un día hizo crisis la compañía de Jesús y sus dis-cípulos. Fue cuando Jesús fue apresado y condenado a muerte. Después de su muerte, como Resucitado, Jesús se apareció a sus discípulos para hacerles ver que el que murió el viernes santo está ahora vivo. El domingo de Resurrección, según relata Lucas, Jesús tuvo una cena de despedida en la cual les prometió el Espíritu Santo, que los ayudaría a salir por el mun-do a predicar la Buena Noticia de Jesús. Tras esto, sa-lió con ellos al Monte de los Olivos donde “se separó de ellos y fue llevado al cielo” (Lc. 24, 50). Pero antes les dio a entender que debían salir a predicar en su nombre la conversión para el perdón de los pecados a todas las naciones, empezando por Jerusalén.La pregunta que nos hacemos, ¿de qué manera Jesús preparó a sus discípulos para esta ingente ta-rea de predicar por el mundo la Buena Noticia? ¿Qué Jesús debían predicar? ¿Qué temas debían desarro-llar? A esta pregunta Mateo no contesta, tampoco el evangelio de Marcos; Juan lo insinúa en el cap. 14, 26 cuando dice Jesús: “El Espíritu Santo que

el Padre enviará en mi nombre les enseñará todo y les recordará todo lo que les he dicho”. El que nos lo explica es Lucas en el cap. 1 de Hechos. En este cap. 1 de Hechos inicia exactamente el libro retomando el final del evangelio de Lucas. O sea, vuelve a men-cionar el tema del banquete, la promesa del Espíritu y les avisa que la Buena Noticia debe ser predicada a todas las naciones y finalmente Jesús sale al Monte de los Olivos y se va el cielo. Lo que relata el cap. 1 de Hechos no es más que repetición de lo que escribió Lucas sobre el banquete de despedida y la ascen-sión de Jesús al cielo.La gran respuesta a la pregunta: ¿cómo preparó Jesús a sus discípulos para la ingente tarea de salir por el mundo a predicar la Buena Noticia “hasta los confines de la tierra”? nos la da Lucas en Hechos, 1, 13: “A los discípulos, después de su pasión, se les presentó dándoles muchas pruebas de que vivía, apareciéndoseles visiblemente durante 40 días, hablándoles acerca de lo referente al Reino de Dios”. En estos 40 días que Jesús dedicó a hablar del Reino de Dios con sus discípulos está la base de todo lo que ellos habrían de predicar y que los evangelistas recogieron en sus evangelios escritos. Estos 40 días no tienen nada en absoluto que ver con la ascensión de Jesús. Sino que forman parte de la escuelita de Jesús, donde Él, pacientemente, fue formando, ilu-minando a la luz de la Pascua de Resurrección todo lo que antes había vivido por tres años con sus após-toles. Y completando todo esto con lo que Jesús in-sinuó a los discípulos de Emaús: “Y empezando por Moisés y continuando por todos los Profetas, les ex-plicó lo que había sobre él en todas las escrituras” (Lc, 24, 27). Las bases del evangelio predicado y de los evangelios escritos fueron puestas por Jesús en su escuelita del Resucitado.

TEXTOS BIBLICOS DIFICILES

En la escuela del Resucitado

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Hay frases que condensan tanta, tanta vida… Frases que trascienden las coordenadas del tiempo y del espacio.En estos días estamos viviendo el Juicio de nuestro querido Enrique Angelelli (Obispo de La Rioja del 68 al 4 de agosto de 1976), suena aun con más inten-sidad aquel: “Hay que seguir andando, nomas” del Pelado.

Me pidieron una nota para el Instituto Espacio para la Memoria (IEM) y después de escribir sobre An-gelelli, me vinieron las ganas de contarles cómo nació la canción: “Hay que seguir andando”. También hace un par de meses atrás estuve en el encuentro Nacional de CEB en Quilmes y ahí pude comprobar una vez más que esta canción es un Himno para esta manera de ser Iglesia.

Si la contemplo a la distancia, 23 años después, creo que es la síntesis de tres espiritualidades. Me expli-co:

Mi espiritualidad pasionista:Mi hermano Guillo, el 16 de octubre de 1989… después de 81 días de pasar de coma 1 a coma 4… de estar lúcido y de estar inconsciente… vivió su Pascua (falleció) con 24 años. Un accidente con la moto en la madrugada del 22 de julio, un golpe muy fuerte en su cabeza.Habíamos podido vivir 24 años muy intensos apren-diendo a ser hermanos… así como con Alfredo, Mandy, Cuchi, Hugo y Michi (mis otros cinco herma-nos) junto a papá y mamá. Yo ya estaba estudiando la teología, en Córdoba.

Había que atravesar el duelo… metabolizar esta pérdida… ir descubriendo “la pascua” en medio de esta muerte. Por eso dice la canción:

Muchos no están, hermano míoy el corazón siente el vacíolas lágrimas corren el rostroellos están junto a nosotros.

Por el dolor, la voz calladaque nos golpea, que nos aplasta.Resiste el hombre que está enjaulado resiste el pueblo acribillado.

El espíritu de un tiempo…En estas estrofas se mezcla “lo personal y lo colecti-vo”, porque en esa primavera del 89 eran los tiempos de “la revolución productiva”, “el plan BB”, “los indul-tos a los genocidas” y mucho, mucho más. Tiempos de mucha hipocresía. Por eso brota:

Nos duele amigo hasta los huesosy se endurecen nuestras entrañaspor la injusticia, la cobardíanos va invadiendo la hipocresía.

Hay tanta bronca acumuladatanta traición disimuladaque se nos cierran hasta las manosy el desencanto nos va aquietando

La espiritualidad de Angelelli y esta manera de ser Iglesia…Los estudiantes pasionistas, junto con Bernardo cp y Eugenio cp fuimos a La Rioja capital para encon-trarnos con la Iglesia de Angelelli, en tiempos del Tinkunako, 31 de diciembre de 1985 y 1º de enero 1986. Nos quedamos unos días y tuvimos la posi-bilidad de escuchar muchos testimonios. La familia donde me aloje amaba al Pelado. Además, durante todo el otoño e invierno de ese año nos preparamos junto con los que estudiábamos en el CEFyT (Centro de estudios filosóficos y teológicos -Córdoba Capi-tal) para participar en los 10 años del martirio de An-gelelli, el 4 de agosto de 1986.

por Carlos cp

¿Cómo nació la canción“Hay que seguir andando, nomas”?

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Revista Santa Cruz. diciembre 2013 - 9

Su espiritualidad se me fue metiendo en mi espíritu, sus poemas, junto con esta espiritualidad pasionista y… así siento que van naciendo estas convicciones:

Que no se cieguennuestras miradasque nuestra historia no está cerrada.Son nuestro llanto nuestra alegríasemilla abierta de nueva vida.

Al hombre nuevo Dios va creandocon nuestro barro lo va engendrando.Jesús camina a nuestro ladono tengas miedo suma tu mano.

Su Espíritu sigue impulsandoa este pueblo Crucificadoel pueblo libre será posiblemuchos testigos hoy nos lo dicen:Angelelli, Oscar Romero,Carlos Mugica, mil compañerossu sangre cantaen nuestras cuerdaseste es el tiempo del Hombre Nuevo.

Ahora vuelvo al tiempo del nacimiento de la can-ción, otoño del 90.

En abril del 90, un Maestro de la Vida, Aldo, me pro-puso que me vaya un par de días de retiro. Decidí ir a un lugar que se llama “la Puerta” a unos pocos km. de Colonia Caroya (mi casa). Me dio una sola con-signa: “Por qué no te vas unos días de retiro y le es-cribís una carta a tu hermano Guillo, lo que sientas”. Así lo hice. El último día, cuando volvía de haber compartido la mesa con una familia, mientras caminaba en un día gris me brotó desde adentro, con música y todo: “Hay que seguir andando, nomas”… así como lo can-tamos ahora. Y cuando llegué a la capilla, me em-pezaron a brotar las otras estrofas, que ya les conté.

No sabía que estaba dando a luz una canción que en el encuentro Nacional de CEB muchos me dijeron: “Tu canción es mi canción, es la canción de nuestra comunidad”; “No sabes lo bien que me ha hecho tu canción en mi vida…”; “Tu canción es un himno de esta Iglesia cercana al pueblo”.

Creo en lo que dice el poeta, Manuel Machado, en la canción: “La Copla”

“Hasta que el pueblo las canta,las coplas, coplas no son,

y cuando las canta el pueblo,ya nadie sabe el autor.

Procura tú que tus coplasvayan al pueblo a parar,

aunque dejen de ser tuyaspara ser de los demás”.

Me asombra, conmueve y alegra este encuentro de al menos tres espiritualidades: 1º. “El espíritu de esa época (principio de los 90)”, 2º. “la espiritualidad de esta manera de ser Iglesia a la que Enrique Angelelli le puso rostro” y… 3º. “mi espiritualidad Pasionista que estaba apren-diendo a rumiar el dolor y amor por la Pascua de mi hermano”…haya podio gestar y parir este “himno” que convoca a muchos a cantar desde adentro: “Hay que seguir andando, nomas”.

Sé que en el seminario teológico y en el encuentro de las CEB en la Rioja de 1996 (20 años del Martirio del Pelado) alguien la llevó… y ahí empezó a volar.

El año pasado tuve el regalo de cantarla con León Gieco y mundo Alas; él tuvo la humildad de apren-derla y la cantamos juntos en los dos festivales soli-darios que hicimos en nuestro Colegio Santa Cruz. Si ponen en youtube “hay que seguir andando” la van a encontrar .Como podrán escuchar es una “canción-marcha”; otros la cantan de otra manera. Así nació… pero “cuando las canta el pueblo…”; así que cántenla como quieran.

Agradezco de todo corazón esta posibilidad se ser cómplice del Espíritu de Jesús, expresado tan clara-mente por Enrique Angelelli en estas otras dos frases: “Hay que tener un oído en el Evangelio y el otro en el Pueblo” y… “Me siento feliz de vivir en la época en que vivo, de cambios acelerados, profundos y uni-versales, porque se nos ha dado la oportunidad de crear algo nuevo”. Tiene razón Angelelli: “Hay que seguir andando, no-mas”.

Los abrazo, Carlos cp

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por Carlos Juliá.

Dios siempre nos da otra oportunidad

El fallecimiento de Nelson Mandela, los treinta años de nuestra Democracia, los ochenta años del Pa-dre Bernardo Hughes y la carta del Papa Francisco “La Alegría del Evangelio” son entre otros, diversos acontecimientos que han hecho vibrar mi corazón, generando algunas reflexiones y pensamientos, que deseo compartir en esta Navidad y a manera de ba-lance del año que finaliza.

*Que generoso fue Dios al enviarle al Pueblo Suda-fricano a Mandela, cuando estaba al borde de la Guerra Civil, para que encontrara los caminos de Paz y Diálogo entre las tribus y los diversos sectores so-ciales sudafricanos.Un pueblo que tenía un gran dolor y al mismo tiem-po cierto grado de responsabilidad, por la historia de muerte y esclavitud de millones de hermanos negros, que fueron entregados para luego ser ven-didos como esclavos, aquellos que tenían la suerte y fortaleza para no morir antes de llegar como mer-cancías, a su destino de esclavo en otro continente.

El apartheid aún no terminó, está en el corazón!! me dijo un hermano en Johannesburgo hace casi 15 años, al final de la Presidencia de Nelson Mandela. Hace falta que transcurran 100 años, para que se borre del corazón y la memoria de este pueblo, con-cluyó.

*Treinta años son una parte importante en la vida de una persona, pero muy pocos en la historia de un pueblo, de una nación. Para aquellos que hoy no lle-gan a los cuarenta y se formaron en Democracia, la Dictadura es un tiempo histórico, un conocimiento asimilado por medio de la educación. De la misma manera que lo hemos hecho con la Guerra del Para-guay o las Invasiones Inglesas. Para otros la llegada de la Democracia les cambió la vida y les permitió entrar a la mayoría de edad, crecer y desarrollarse en libertad. Por nuestra parte, los más grandes que aún continuamos activos y participando de las lu-chas por los cambios sociales, podemos apreciar el inmenso valor de vivir en democracia, a pesar de to-das sus fallas y defectos, por que fuimos niños con el golpe del 55 “La Revolución Fusiladora”; jóvenes con el Golpe de Onganía-Levingston-Lanusse y adultos con la masacre del Proceso de Videla-Viola-Massera-Galtieri. Tres puntos de partida para apreciar el valor de poder vivir la vida en un Estado de Derecho. Cuanta felicidad que nuestros nietos hayan podido nacer y crecer en Democracia.

*Cuando estaba por cumplir los 70 años el Padre Bernardo Hughes y era hora para pensar en una misión más tranquila, al dejar de ser el Párroco de Santa Cruz, comenzó a buscar un lugar, un barrio de excluidos, desposeídos, donde estuvieran los más pobres de los pobres para ir a misionar, a compartir el dolor y las alegría del amor de Cristo. Finalmente los caminos de Dios lo llevaron hasta la Capilla del barrio San Cayetano, en Campana. Fueron once años muy duros, para el alma y para el cuerpo de Bernardo. El cree que no hizo todo lo que pensaba que podía haber hecho. Pero el martes 3 de diciem-bre la comunidad de San Cayetano le demostró lo contrario y tal es así, que el Obispo de Zárate-Cam-pana, destinará a un sacerdote y dos seminaristas, para continuar su obra en el barrio, para que esta no se pierda y siga creciendo.

Ahora Bernardo a los 80, eligió continuar misionando en Formosa. Ni las temperaturas superiores a los 40 grados, impedirán que nuestro querido Padre Ber-nardo acompañe a los que sufren, quienes podrán sentir que Jesús, está más cerca de ellos.El entonces Cardenal Jorge Mario Bergoglio un día me dijo… “Bernardo es un Sabio”. La definición más justa para un misionero que eligió seguir el camino de Jesús, lo cual nos llena de alegría como seres hu-manos y como Cristianos.

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Revista Santa Cruz. diciembre 2013 - 11

*Dejé para el final la Exhortación Apostólica EVAN-GELII GAUDIUM del Santo Padre FRANCISCO, sobre el Anuncio del Evangelio en el mundo actual. No pretendo hacer un análisis de la primera carta del Papa Francisco, por mucho que me haya moviliza-do al leerla, como también me sucede cuando leo o escucho sus mensajes, que los medios de comu-nicación difunden. En ese momento no hago más que volver a escuchar las mismas afirmaciones, los mismos pensamientos que nos trasmitiera cuando era el Cardenal Jorge Mario Bergoglio, ya sea en las audiencias privadas, en las declaraciones públicas o a través de sus Homilías.

Es una caricia para el alma, poder comprobar que aquellos que por entonces no querían escuchar sus verdades, dudaban de su palabra, y preferían creer en infundadas elaboraciones periodísticas, hoy de-ben reconocer que se sumaron a campañas que respondían a malsanos intereses. Gracias por haber-nos permitido creer en su palabra y en su verdad. Gracias por poder hacerlo ahora, aquellos que ayer no lo quisieron escuchar. Gracias Dios, por habernos dado al Papa Francisco que sigue predicando con-tra la exclusión, estando junto a los excluidos y a los más pobres entre los pobres.

Mandela, Gandhi, Luther King, por una parte. Fran-cisco, Angelelli, Bernardo, como tantos otros religio-sos o no, desconocidos, anónimos misioneros de las Causas Justas, incansables luchadores por la Vida, el Amor y la Paz, demuestran cuan generoso es Dios con nosotros.

Celebremos con alegría el nacimiento de Jesús de Nazaret, como verdaderos Cristianos. No importa cual sea tu Dios, el Dios en el cual crees. Segura-mente si no has caído en las garras del falso Dios Mercado, del materialismo, el individualismo, parti-cipes de cualquier credo o religión, tu Dios es el Dios de la Vida, del Amor, de la Paz y Él siempre nos dará otra oportunidad.

Desde El Grito de los Excluidos les deseamos unaMuy Feliz Navidad y Feliz Año Nuevo.

Al Nacer Jesús …

Al nacer Jesús en el portal de Belén nos muestra el camino del Reino:Sencillez y desapego. Catre la cuna, colchón de paja .Desnudez de vestido el pañal.

Imagen del desamparo,mensaje de orfandad..Con los brazos extendidos pide que en Él y por Él como hermanos nos cuidemos y auxiliemos en la necesidad.

Al nacer Jesús …de María se reivindica en Ella el lugar de la mujer como persona en la historia.Ejemplo de ser humano libre.que decide responsablemente obedecer a la propuesta amorosa de Dios.

Al nacer Jesús en el portal de Belén brilló la Estrellaencendida con luz de eternidadpara sacarnos del ostracismo de la incertidumbre y la incredulidad.

Luz que se hace fuego vivollama incandescente ,cuando hacemos olvido del sí mismoy lo transformamos en amor por los demás .¡El alma entonces canta el gloria por el avenimiento de una nueva humanidad!

Al nacer Jesús nos invita hoy a ser :Protagonistas de la historia, memoria del pueblo.multiplicadores de su mensaje liberador .A sostener con corajuda valentía la democracia con decisión y participación ciudadana responsable.Y cantar su grandeza con los ángeles mediadores,- compañeros de camino que en la vida supi-mos conseguir-

Norma Paredes

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NO ROBARÁS

Huelgas policiales, saqueos, caos. Los últimos acon-tecimientos mostraron un tejido social que no está roto pero sí muy dañado. La imperiosa necesidad de darle continuidad a algunas de las buenas políticas públicas impulsadas por el oficialismo replanteando ejes y sentidos.La república goza de buena salud: el oficialismo pierde elecciones, la libertad de expresión es iné-dita, hay funcionarios procesados por la justicia, y el Congreso, de 2008 a esta parte, ha recuperado su valor y presencia como ámbito de la discusión.A contramano del análisis recurrente en cierta in- telectualidad conservadora, los hechos de las últi-mas semanas revelaron, en cambio, la fragilidad de las instituciones bajo cuya custodia pretenden estar los preceptos sociales básicos para una conviven-cia. La violencia de los saqueos en diferentes y tantas provincias da cuenta sin duda de una organización precisa pero no puede dejar de alertar que, más allá de cualquier planificación, hay una considerable cantidad de personas dispuestas a robar y cometer delitos contra otros. En HAMLET uno de los soldados, Marcelo, ve al pro-tagonista agobiado por sus fantasmas y dice: “_ Hay algo podrido en Dinamarca”. No es una sentencia sino una intuición; se da cuenta que algo malo, que todavía no sabemos qué es, ocurre y desencadenará acciones y reacciones. En cierto modo, hoy vemos esta realidad política como Marcelo, sin saber qué es lo que viene pero con una cierta preocupación y sospecha.Hay, al menos, dos miradas sobre los conflictos. Una

que debe recaer sobre la conducta de las policías y sus reclamos; y otra que va de la mano de lo anterior y requiere preguntarse sobre ese trasfondo que fa-vorece la acción delictiva en ciertos sectores popu-lares.Primero, resulta increible que fuerzas de seguridad que a lo largo de la historia se han cansado de re-primir al movimiento obrero hoy pretendan alcanzar los derechos conquistados, y que además lo quieran hacer adscribiendo a una identidad de trabajadores. Lo que hasta hace poco era obvio, la subordinación de las fuerzas al poder político, se torna confuso cuando estas fuerzas consiguen crear una atmós-fera de caos que se cobró la vida de varias personas. Posiblemente por la rapidez de los hechos aún no hayamos tomado conciencia de la gravedad de lo ocurrido.Segundo, la política debe acusar el golpe. La obsce-na planificación con la que se sucedieron los hechos no oculta una trama social dañada. Las elecciones, pero en particular la derrota del oficialismo en distri-tos donde las políticas sociales impulsadas tuvieron y tienen un mayor desarrollo e inserción revelaron una falla, una ausencia, o al menos una presencia in-suficiente del Estado.Aunque suele no ser felíz el uso de términos vincu-lados al marketing para hablar de cuestiones socio-políticas, vale la digresión para un diagnóstico poco frecuente: la ausencia de una post-venta que anime y fidelice a los clientes. Esto es, ciudadanos benefi-ciados con políticas como la Asignación Universal por Hijo, nuevas jubilaciones, y/o el plan Conectar Igualdad, entre otras, no pudieron ser contenidos en un espacio político definido, en un proyecto de país capaz de ir por más. Es cierto que hay algunas generaciones que fueron víctimas de un Estado ausente: desigualdades en-trelazadas y persistentes, como plantea Charles Tilly desde hace tiempo. Pero también es verdad que el Estado no supo cómo articular esas políticas social-es, costosas y en muchos casos de avanzada, con un proyecto que se enuncia y se pretende emancipa-dor. Una vez más, uno de los principales puntos fuertes del kirchnerismo ha sido fortalecer las instituciones de la república. Ahora el desafío pasa por compro-meterse y favorecer las condiciones para una nueva ciudadanía capaz de vincularse a proyectos políticos (que necesariamente serán diversos) pero que con-seguirán limitar y canalizar los conflictos respetando a los demás.

Gerardo Girón

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Teléfono: [email protected]

Soñar con lo posible

Cada día, miles de mujeres en el mundo nos encon-tramos con la vida, muchas veces, con una energía sobrenatural. Eso es posible porque cuando el Señor nos convoca para las diversas tareas, con ellas viene la fortaleza necesaria para llevarla a cabo.Solteras, casadas, amas de casa, empleadas, profe-sionales, empresarias, religiosas, artistas, heroínas, todas dispuestas, con una entrega profunda, propio de la mujer, generadora de vida y de amor.Y dentro de estos miles y miles hay una clase muy especial, la de las mujeres mayores; para muchos las abuelas, aunque no todas lo somos. Y hemos llega-do a esta etapa con el deseo irrenunciable de alcan-zar sueños, sueños que sólo se cumplen, cuando creemos realmente que se pueden convertir en rea-lidad.

En plena actividad, en nuestros encuentros de Re-sanándonos, algunas expresaron su inquietud por aprender computación. ¿ Por qué no? Entrar en un mundo donde lo mágico y lo técnico se unen para hacerse lejano de lo que fue nuestro aprendizaje, en otros tiempos, nuestra curiosidad y beneficios a futuro lo hicieron cercano, más aún, lo hicieron po-sible.Pusimos alas al sueño, realizamos la gestión co-

rrespondiente y el 19 de setiembre, las soñadoras concurrieron a su primer clase de informática. Una Escuela de Educación Técnica, del barrio, nos abrió sus puertas y su corazón.Entrar en una escuela, después de tantos años, con actitud de aprender, fue una gran emoción, cruzar el patio poblado de adolescentes era como una gran fiesta, de la cual éramos parte. Quisimos ser parte y lo logramos.Sentadas en el aula frente a sendas computadoras el Rector se acercó a darnos la bienvenida, Eugenia, cálida y dispuesta es la docente a cargo; secundada por un grupo de alumnos de 4° y 5° año, que son nuestros guías.

Cuando pase el tiempo y nuestra fragilidad no camine al mismo paso que nuestros sueños, esto que hoy intentamos aprender nos dará alas…Con ellas podremos viajar a cualquier lugar del mun-do, pasear por nuestra hermosa ciudad, ir a la ópera, escuchar música, mirar cine, investigar, comunicar-nos con nuestros amigos, familia y hacer nuevos amigos.

Este testimonio es para toda las mujeres de esta clase especial que a veces no vemos, que además de nuestras obligaciones, podemos disfrutar a pleno la vida y agregar una más: liberar nuestros sueños.Y también para que los más jóvenes, hombres y mu-jeres, descubran que siempre se puede traspasar los límites de la razón, soltar al aire nuestros sueños, como cometas al aire hasta donde sólo Dios los ve. Y Él, como siempre, desde su amor, nos envía los re-cursos para hacerlos realidad.Así nació nuestro CURSO DE COMPUTACIÓN.

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Area Política

FE CRISTIANA Y COMPROMISO POLÍTICO

Por Alicia de Sá Torres

“…La fe (…) es como una bicicleta: se vuelve efectiva en la sociedad sobre dos ruedas:

la rueda de la religión y la rueda de la política”.

Leonardo Boff

Con esa convicción nació en la parroquia Santa Cruz hace varios años la idea de sumar un Área Política al ya amplio abanico de áreas que allí funcionaban. Quienes participamos en ella sentimos que lo hace-mos como un verdadero ejercicio de ciudadanía, a la vez que una auténtica puesta en acción del Evan-gelio, creando conciencia crítica en torno al mundo y al momento histórico en que nos toca vivir (“…se necesitan herramientas adecuadas de análisis de la realidad social”. [L. Boff]).Es por eso que frente al individualismo actual, a la sectorización, a la “alergia a lo político”, nos propu-simos generar espacios y compartimos actividades con otros, para despertar y despertarnos a la par-ticipación y el compromiso, convencidos, junto con Paulo Freire, de que “la realidad no es así”, sino que “está así”, con lo cual apostamos a que se puede cambiar.Por eso, a modo de balance, queremos contarles el camino que recorrimos en este año 2013:En primer lugar, como lo hacemos habitualmente, articulamos nuestro accionar con organizaciones barriales, de la CABA y de Derechos Humanos, en el ámbito parroquial y extra parroquial y, entre otras cosas, hicimos memoria de la vida de tantos mártires

laicos y religiosos comprometidos -cada cual a su modo- con la construcción del Reino.Para continuar celebrando la vida acercamos a Remo e Irmina, protagonistas del libro “Monte Madre”, de Jorge Miceli. Ellos nos trajeron el testimonio de su experiencia en el monte chaqueño durante los años ’70 cuando, protegidos por la naturaleza y la solidari-dad humana, lograron escapar al destino de muerte que les había trazado la dictadura, por su lucha en pos de la justicia en el medio campesino. Ellos fue-ron y son militantes cristianos laicos y constituyen un ejemplo para quienes hoy siguen apostando a la utopía de un mundo mejor.

Entre todas las artes, el teatro es el intérprete privi-legiado de los dramas humanos más profundos. La entrega y la fidelidad a las causas justas, el conven-cimiento que anima a religiosos y religiosas, se ex-presa a menudo con singular transparencia sobre las tablas. Así sucede en la pieza teatral “Golpes a mi puerta”, de Juan Carlos Gené, cuya presentación en Casa Nazaret promovimos desde el Área Política, como un aporte más al esclarecimiento y la refle-xión.

Pero el eje vertebrador de nuestra actividad anual fue la Perspectiva de Género, temática que con-densa una de las problemáticas más acuciantes de nuestra sociedad: la que se refiere al lugar de sub-ordinación de la mujer con respecto al varón, que no pocas veces desemboca en violencia, descalifi-cación, discriminación, inequidad. Convencidos de la necesidad de deconstruir modelos naturalizados, celebramos la vida de nuestras hermanas de todos los tiempos y latitudes, con especial acento en lo latinoamericano. Tomando como marco teórico los aportes de las Ciencias Sociales, le pusimos una nota de color incorporando la música y la poesía, trayendo la voz y la palabra de tantas mujeres que dejaron un legado a la humanidad desde su arte y su sensibilidad. Las celebramos porque ellas abrieron rumbos en el camino hacia la liberación femenina; camino que sigue abierto, porque la opresión pa-triarcal que lleva tantos siglos de dominación, aún está presente.

Claro que la mirada puesta sobre la mujer nos mostró en espejo al varón. Y así fue como nos cuestionamos sobre las causas y efectos del machismo. Contamos entonces con la presencia de un especialista, el Li-cenciado Jorge Casin quien, en el taller sobre Mas-culinidades, que incluyó el abordaje de material

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Equipo de asistencia en salud mental

San RafaelCoordinación: Lic.. Sandra M. Hojman • PSICOTERAPIA- INDIVIDUAL

dé niños, adolescentes v adultos,• PSÍCODIAGNOSTICO -ORIENTACIÓN VOCACIONAL• PSICOPEDAGOGÍA • ORIENTACIÓN: FAMILIAR VEN EL NOVIAZGO

Diez años de trabajo institucional avalan nuestro compromiso con la comunidad.Un equipo de psicólogos y psicopedagogas, altamente capaci-tados, Solidario v que busca promover la solidaridad.Honorar-ios accesibles y posibilidad de becas parciales.

Solicitar turno al 15 6466 2108. Consultorios en:

Villa Devoto -Liniers - Floresta- Villa del Parque • Caballito• Villa Crespo • Palermo

teórico y gráfico pero que propició, sobre todo, lo vi-vencial, nos permitió profundizar sobre el tema.

Otra vuelta de tuerca nos llevó a la propia insti-tución eclesial. Nuestro último taller de reflexión (Mujer, Iglesia y Patriarcado) estuvo a cargo de tres notables estudiosos en la materia: el sacerdote Do-mingo Bresci, el sociólogo Fortunato Mallimaci y la teóloga Diana Viñoles. Con solvencia, cada uno de ellos mostró un aspecto del problema que aún hoy, en pleno siglo XXI, afecta desde los cimientos a la Iglesia y a toda la sociedad.

Es por ello que nos proponemos seguir ahondando en el debate sobre la dimensión política de la vida desde nuestra fe. Seguiremos participando y gene-rando espacios que nos fortalezcan y nos ayuden a construir con otros, para convertirnos mutuamente en sujetos sociales comprometidos con la transfor-mación de los aspectos injustos y excluyentes que presente la realidad, y promoviendo solidaridad a través de distintas tareas orientadas a profundizar el acceso a derechos, la inclusión y la igualdad, porque a eso nos invita cada día el mensaje de Jesús.

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Qué lindo hubiese sido que en esta última columna del año pudiésemos dar solamente noticias alenta-doras… pero…

La gestión del caso AMIA está empantanada. Irán no quiere citar por la fuerza pública a los acusados por la Argentina para que declaren ante Canicoba Corral.

En Siria, si bien con menos frecuencia, persisten las matanzas que ensangrentan al país. Ser democráti-co allí es peligrosísimo: te perseguirá All Asad. Y también All Qaeda. La única salvación, refugiarse en Egipto.

El narcotráfico avanza en nuestro país . Sin duda, el Gobierno está mostrando preocupación por solu-cionar el problema, pero todavía no hay estrategias adecuadas.

La violencia inmediata frente a cualquier conflicto se ha enquistado entre nosotros. Y cada vez con más gravedad.

Los casos de corrupción se investigan sin mucha fuerza, como confiando en que la prescripción los solucionará.

Casi una mujer por día es asesinada en nuestro país por problemas “de género”.

Es fundamental solucionar los problemas de edu-cación, base necesaria para todas las demás so-luciones. Lamentablemente los resultados no se verán en el corto plazo, pero todos debemos preo-cuparnos ya mismo en el tema. Todos, en especial los padres de familia.

¡Ya creíamos solucionados los problemas de la ba-rrera de Fray Cayetano en Flores! Se había restitu-

ido el tránsito, pero ¿saben qué pasó? Las barreras empezaron a funcionar mal: Bajan correctamente cuando aparece un tren, pero cuando éste está cerca… ¡se levantan! No pierdan la esperanza, en marzo, cuando regresemos, todo funcionará a las mil maravillas.

Capítulo de las “buenas”: El Padre Bernardo cumplió 80 años, y lo celebramos con entusiasmo en Santa Cruz. ¡Tenemos tanto para agradecerle!

Y para Mario de Haedo, muchas gracias por su cons-tante apoyo (moral y pecuniario) a nuestra revista.

Un abrazo.

por Ariel Santanera

Disciplina partidaria

Los legisladores se deben a su conciencia y a los votantes. La política no es un campeonato entre clubes, en el cual lo principal fuese la victoria. Lo importante es el bien de la comunidad.

Examen

Estaba examinando a un Técnico Químico que se postulaba para un cargo en la empresa donde yo trabajaba. Le pregunté qué tema era el que más le había interesado en toda su carrera estudiantil. Me dijo que lo que más le había interesado era las en-zimas.Le pregunté entonces qué era una enzima. Aunque no se crea, su respuesta fue: “-No sé”.

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Meditación.

Las cosas tienen sentido si sirven al Hombre. El Hombre tiene sentido si sirve a Dios. Dios es quien da sentido a todo.No soy monje ni sacerdote. Luego, estoy por vo-cación dedicado a manejar las cosas, a trabajar con ellas. Debo hacer las cosas, pero teniendo en cuenta que valen por el Hombre. Debo dar primacía a mi relación con mis hermanos, y debo alimentarla con mi relación con DiosNo amo a Dios si no amo a mis hermanos. De nada valen mis cosas si no son para mis hermanos. No sirvo, si no sirvo a Dios y a los hombres.

El Mensaje

A través de todas las limitaciones que había acepta-do al encarnarse, Cristo sabía que su Mensaje era transcendente. Y que era aplicable siempre, en todo lugar, a cualquier hombre y a cualquier sociedad.Ese secreto se transparenta en su oración al Padre: cualquier hombre que se enfrente al “Padrenuestro” lo comprenderá y estará en condiciones de recibirlo y vincularse con Dios. Nada de su texto le chocará, nada requerirá una explicación o una transcultu-ración. Nada, salvo las dos primeras palabras: “Padre Nues-tro”. Es que ése es el mensaje novedoso que Cristo nos trae. Esa es su buena nueva: Dios es nuestro Pa-dre y nosotros somos hermanos. Dios se redujo, se limitó, vino a nosotros para dejar-nos simplemente estas dos palabras que describen el Reino. Recojámoslas, y todo lo demás se nos dará por añadidura.

No es lo mismo.

La fealdad puede corregirse, el ignorante puede al-canzar la sabiduría, la maldad no descalifica defini-tivamente. Pero no es lo mismo bello que feo, ver-dad que error, bien que mal.Sinceridad, espontaneidad, libertad… son indu-dablemente valores, y está bien que sean remarca-dos en nuestra sociedad moderna, pero……no es lo mismo correcto que incorrecto, prolijo que desprolijo, limpio que sucio, amable que des-deñoso, puntual que impuntual, lenguaje elegante que grosero.

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por Luanda

[email protected]

Una pistola en cada mano

En esta película, el director español Cesc Gay, indaga en el universo masculino (con un toque de humor). Y lo hace a través de cinco historias independientes. En cada una se produce un en-cuentro fortuito entre dos personajes que man-tienen algún tipo de vínculos. Estos encuentros, además, tienen en común que se pueden termi-nar en cualquier momento. Esto logra agregarle una tensión más a cada escena.

En cuanto al tema que se propuso transitar, el cineasta explica: “Entre todas las carencias mas-culinas, la que más quería tratar era el orgullo. A todos los actores les daba la misma pauta de in-terpretación: “imaginate que eres un boxeador y te están matando a golpes, pero sigues ahí, de pie, orgulloso” El hombre ya no manda como antes. La mujer obtuvo muchos derechos y cambió mucho su papel en la sociedad (…) Hemos entrado en el mundo de las emociones, pero los comportamientos no cambian de un día para el otro.”

Gay señaló, además, que tuvo al western y a actores como John Wayne y Kirk Douglas como modelos, “porque lo más cómico

era poder verlos afectados, llorando. Son los hombres que supuestamente deberíamos ser, fuertes como un árbol. Quería reírme con eso, porque el hombre moderno y la relación las mu-jeres cambió mucho, pese a que todos querría-mos ser John Wayne” Con esto se explica el por qué del título.

Es un film delicioso, también, gracias a las mara-villosas interpretaciones de reconocidísimos actores españoles como Luis Tosar, Eduard Fer-nandez, Javier Cámara, entre otros, a los que se suman Ricardo Darín y Leonardo Sbaraglia.

Que la disfruten y hasta la próxima, Luanda

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Leonardo Boff.

Nelson Mandela, con su muerte, se ha sumergido en el in-consciente colectivo de la humanidad para ya nunca irse de ahí, porque se ha transformado en un arquetipo uni-versal, de una persona injustamente condenada que no guardó rencor, que supo perdonar, reconciliar polos an-tagónicos y transmitirnos una inquebrantable esperanza en que el ser humano todavía tiene solución. Después de pasar 27 años en reclusión y ser elegido presidente de Sudáfrica en 1994, se propuso y realizó el gran desafío de transformar una sociedad estructurada en la suprema in-justicia del apartheid, que deshumanizaba a las grandes mayorías negras del país condenándolas a ser no-perso-nas, en una sociedad única, unida sin discriminaciones, democrática y libre.Y lo consiguió al escoger el camino de la virtud, del perdón y de la reconciliación. Perdonar no es olvidar. Las llagas están ahí, muchas de ellas todavía abiertas. Perdonar es no permitir que la amargura y el espíritu de venganza tengan la última palabra y determinen el rumbo de la vida. Perdonar es liberar a las personas de las amarras del pasado, pasar página y empezar a escribir otra a cuatro manos, de negros y de blancos. La reconciliación sólo es posible y real cuando hay plena admisión de los crímenes por parte de sus autores y pleno conocimiento de los ac-tos por parte de las víctimas. La pena de los criminales es la condenación moral ante toda la sociedad.Una solución de esas, seguramente originalísima, supone un concepto ajeno a nuestra cultura individualista: el Ubuntu que quiere decir: “yo sólo puedo ser yo a través de ti y contigo”. Por tanto, sin un lazo permanente que ligue a todos con todos, la sociedad estará, como la nues-tra, en peligro de desgarrarse y de conflictos sin fin.En los manuales escolares de todo el mundo deberá figurar esta afirmación humanísima de Mandela: “Yo lu-ché contra la dominación de los blancos y luché contra la dominación de los negros. Cultivé el ideal de una so-ciedad democrática y libre, en la cual todas las personas puedan vivir juntas en armonía y tengan oportunidades iguales. Este es mi ideal y deseo vivir para alcanzarlo. Pero, si fuera necesario, estoy dispuesto a morir por este ideal”.

¿Por qué la vida y la saga de Mandela fundan una espe-ranza en el futuro de la humanidad y en nuestra civili-zación? Porque hemos llegado al núcleo central de una conjunción de crisis que puede amenazar nuestro futuro como especie humana. Estamos en plena sexta gran ex-tinción en masa. Cosmólogos (Brian Swimme) y biólogos

(Edward Wilson) nos advierten que, si las cosas siguen como están, hacia 2030 culminará este proceso devastador. Esto quiere decir que la creencia persistente en el mundo entero, también en Brasil, de que el crecimiento económico material nos de-bería traer desarrollo social, cultural y espiritual es una ilusión. Estamos viviendo tiempos de barbarie y sin espe-ranza.

Cito a una persona libre de toda sospecha, Samuel P. Hun-tington, antiguo asesor del Pentágono y un analista pers-picaz del proceso de globalización, que al final de su libro El choque de civilizaciones dice: “La ley y el orden son el primer pre-requisito de la civilización; en gran parte del mundo parecen estarse evaporando; a escala mundial, la civilización parece, en muchos aspectos, estar cediendo ante la barbarie, generando la imagen de un fenómeno sin precedentes, una Edad de las Tinieblas mundial que se abate sobre la humanidad”(1997:409-410).Añado la opinión del conocido filósofo y científico político Norberto Bobbio que como Mandela creía en los derechos humanos y en la democracia, como valores para equili-brar el problema de la violencia entre los Estados y para una convivencia pacífica. En su última entrevista declaró: “no sabría decir cómo será el Tercer Milenio. Mis certezas caen y solamente un enorme punto de interrogación agi-ta mi cabeza: ¿será el milenio de la guerra de exterminio o el de la concordia entre los seres humanos? No tengo posibilidad de responder a esta pregunta”.Ante estos escenarios sombríos Mandela respondería se-guramente, fundándose en su experiencia política: sí, es posible que el ser humano se reconcilie consigo mismo, que sobreponga su dimensión de sapiens a la de demens e inaugure una nueva forma de estar juntos en la misma Casa. Tal vez valgan las palabras de su gran amigo, el arzo-bispo Desmond Tutu, que coordinó el proceso de Verdad y Reconciliación: “Habiendo encarado a la bestia del pa-sado frente a frente, habiendo pedido y recibido perdón, pasemos ahora la página. No para olvidar ese pasado sino para no dejar que nos aprisione para siempre. Avancemos en dirección a un futuro glorioso de una nueva sociedad en la que las personas valgan no en razón de irrelevancias biológicas u otros extraños atributos, sino porque son personas de valor infinito, creadas a imagen de Dios”.Mandela nos deja esta lección de esperanza: nosotros po-dremos vivir si, sin discriminaciones, hacemos realidad el Ubuntu.

El significado de Mandela para el futuro amenazado de la humanidad

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Película «Choele» Fracisco Murray cp.

La película “Choele”, el segundo largometraje de Sasiaín, fue ganadora del premio Fipresci del 23° Festival Internacional de Cine de Mar del Plata. Está protagonizada por Leonardo Sbaraglia, Gua-dalupe Docampo y Lautaro Murray (hijo menor de Charly Murray y Mabel Martiello….y ahijado de María Lía Murray de Domper y Francisco Murray cp)Periodista: Llama mucho la atención la actuación de ese pre-adolescente que le está haciendo frente a la multitud de cambios por los que debe pasar. ¿Cómo trabajaste con él para obtener esa naturalidad en su performance que era tan impor-tante para la película?Sasiaín: “Lautaro Murray nació en un pueblo que respira aire de teatro, Beltrán. Allí presenció mu-chas clases que tomaban sus hermanas en el Te-atro El Galpón que inició Pablo Otazú. Cuando fuí a la casa de Lautaro a tomarle el casting le pedí que compartiera algunos objetos, y me deslum-bró con imágenes poéticas y afectivas hacia su padrino. Tiene potencia en la mirada, sabiduría en sus pensamientos, tranquilidad en el cuerpo, tal vez heredada de su padre Charly Murray, quien fue un gran colaborador, un padre generoso.”

“Fernando: No quería dejar pasar más días sin enviarles un especial saludo a todos los que de-jan la dirección, organización y demás de la Re-vista Santa Cruz. Un saludo y un agradecimiento porque me abrieron las puertas (páginas) de la misma y siempre me hicieron sentir respetada y bien acogida. Ojalá con el nuevo equipo, cambie lo que haya que cambiar para bien y siga ade-lante lo que deba mantenerse. Espero que mi relación con ellos sea igual y, sobre todo espero que la revista conserve la calidad y el espíritu franco y abierto que la caracteriza. Un abrazo fraternal en Jesús, Dios, hermano amigo.”

Alba Lanzillotto.

Enrique LopardoPor diversas circunstancias, para este número de la revista Enrique no pudo hacernos llegar su acostumbrada columna sobre espiritualidad. (Acostumbrada y, sabemos, esperada).Nos encargó que hagamos llegar a los lectores un fuerte abrazo. Y pide al Señor Sacramentado y a la Virgen por todos nosotros.

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Palabras de maestras

Construir subjetividad

Por Luisa Fankhauser

Como de costumbre, son cuestiones de orden co-tidiano las que llevan a mi reflexión sobre los cam-bios que se han producido en lo social, a analizar las variables que intervienen y las posibles líneas de trabajo en el ámbito escolar.Mi concurrencia a una librería en busca de un texto: “Yo, el Supremo”, de Roa Bastos, y la respuesta del librero: “No se editan porque no son comerciales…”, me deja perpleja. “Mire en la vidriera y verá qué es lo que se vende”, agrega. Hago un paneo por la vidriera y observo una profusión de textos sobre chimentos de la farándula con autores…, en fin… Eso se vende como pan caliente.Querer saber quiénes eran dichos autores me lleva a introducirme en la TV. Y, con sorpresa, advierto que en un mismo horario se producen programas de chimentos en casi todos los canales.En el medio, aparece una publicidad “¿Qué miran nuestros hijos?”, y pensé: ¿Qué miran los adultos? ¿Qué se les oferta y qué posibilidad tienen, en fun-ción de lo que ven, de reflexionar con sus hijos, esos adultos?Desde hace tiempo tengo interés en escribir sobre la construcción de la subjetividad en términos más o menos eruditos, tomar autores de peso para fun-damentar mis afirmaciones. Pero la realidad golpea más fuerte y es más palpable, próxima, y nos invita a pensar sobre lo que nos pasa a todos, en este tiem-po… Como Equipo Docente, nuestro método de ver, vernos, juzgar, juzgarnos y obrar, nos instrumenta para realizar la tarea.La cultura del talk show, del Gran Hermano, del

chisme y el cholulaje, invade nuestras pantallas, se traslada al aula y vuelve inmanejable, a veces, la dinámica escolar. Se es por lo que se muestra, por lo que se tiene. ”Es la linda, se hace la linda”. Se usan los celulares para divulgar cuestiones íntimas que estallan en la clase. Bucear en las vidas ajenas para poner de manifiesto nuestras miserias humanas, para escarnio y desvalorización del otro, para dejar expuesto lo privado, lo personal.Una cultura que, queriendo sacarse la careta, llega a excesos impensados. La sutileza ha dejado su lugar a lo explicito. La delicadeza a la grosería. La compe-tencia es la pátina del accionar cotidiano. De la pa-labra a la acción. El humor es de grueso calibre y la ironía es cruel.

La frivolidad es materia corriente, al igual que la desproporción. La circulación de la palabra no ga-rantiza el razonamiento o la argumentación. La in-formación es el chisme, el rumor; la documentación veraz circula sólo en los ámbitos académicos. Con este cóctel se conforman subjetividades que portan niños y adultos. Adultos que están cansados por hor-as de trabajo y presiones de todo tipo, que luchan por mantener su nivel económico o de subsistencia; adultos que no tienen tiempo para otra cosa que no sea descansar o distraerse de las tensiones cotidia-nas; que luchan por la edad, la apariencia, que “se matan” para estar en forma ¿Esos son los adultos que tienen que ponerse a reflexionar con sus hijos sobre lo que se ve en la televisión?¿Qué espacios reales de revisión de sus vidas tienen, sin deprimirse? ¿Quién puede con ellos contener y encauzar el pensamiento desde la experiencia de vida? Porque, convengamos, no se puede vivir en el consultorio del psicólogo…Por otro lado, ¿podemos apropiarnos de modelos alternativos de comportamiento social?’ ¿Están al al-

cance de la mano de los actores sociales para poder comparar y confrontar pautas de comportamiento y los supuestos que subyacen?Lo colectivo como vía de conformación de estilos sociales también se ha roto, el individualismo lo sustituye. El otro, la otredad, se declama, pero los es-pacios de compartir se diluyen. Y si existen, la queja y la catarsis toman su lugar, dejando la reflexión a un costado.

No hay leyes ni control de las instituciones que cam-bien los modos de sentir, pensar y actuar de loa su-jetos sociales. Es la sociedad toda la que exige cam-bios, cuando los siente propios. La defensa de los derechos humanos en nuestro país es el resultado de la experiencia de su vulneración. Experiencia vis-ceral de su vulneración.Los cambios tecnológicos y sociales de este siglo no han tenido aún un registro en la sociedad para pro-tegerse y conducir reflexivamente su tendencia.Si somos capaces de interrogar a la realidad, bus-cando los supuestos que se esconden en sus men-sajes y propuestas de vida, tal vez empecemos a recorrer el camino que nos incluya como actores de cambio; pero es necesario hacerlo colectivamente, para que sea efectivo.

La escuela puede tomar un lugar, una cierta respon-sabilidad ante el uso de las TICS (Tecnologías de la Información y la Comunicación), mas no puede ni debe hacerse cargo del cambio cultural al que nos ha empujado el capitalismo salvaje.Esto requiere de un trabajo coordinado de todas las fuerzas sociales, acordando pautas de vida y mo-delos de comportamiento en los que el énfasis esté puesto en los vínculos humanos.Los que vivimos en pequeñas comunidades tene-mos el espacio adecuado para repensar nuestras representaciones, para plantearnos preguntas y analizarlas también con criterio valorativo.

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Palabras de maestras

Construir subjetividad

Por Luisa Fankhauser

Como de costumbre, son cuestiones de orden co-tidiano las que llevan a mi reflexión sobre los cam-bios que se han producido en lo social, a analizar las variables que intervienen y las posibles líneas de trabajo en el ámbito escolar.Mi concurrencia a una librería en busca de un texto: “Yo, el Supremo”, de Roa Bastos, y la respuesta del librero: “No se editan porque no son comerciales…”, me deja perpleja. “Mire en la vidriera y verá qué es lo que se vende”, agrega. Hago un paneo por la vidriera y observo una profusión de textos sobre chimentos de la farándula con autores…, en fin… Eso se vende como pan caliente.Querer saber quiénes eran dichos autores me lleva a introducirme en la TV. Y, con sorpresa, advierto que en un mismo horario se producen programas de chimentos en casi todos los canales.En el medio, aparece una publicidad “¿Qué miran nuestros hijos?”, y pensé: ¿Qué miran los adultos? ¿Qué se les oferta y qué posibilidad tienen, en fun-ción de lo que ven, de reflexionar con sus hijos, esos adultos?Desde hace tiempo tengo interés en escribir sobre la construcción de la subjetividad en términos más o menos eruditos, tomar autores de peso para fun-damentar mis afirmaciones. Pero la realidad golpea más fuerte y es más palpable, próxima, y nos invita a pensar sobre lo que nos pasa a todos, en este tiem-po… Como Equipo Docente, nuestro método de ver, vernos, juzgar, juzgarnos y obrar, nos instrumenta para realizar la tarea.La cultura del talk show, del Gran Hermano, del

chisme y el cholulaje, invade nuestras pantallas, se traslada al aula y vuelve inmanejable, a veces, la dinámica escolar. Se es por lo que se muestra, por lo que se tiene. ”Es la linda, se hace la linda”. Se usan los celulares para divulgar cuestiones íntimas que estallan en la clase. Bucear en las vidas ajenas para poner de manifiesto nuestras miserias humanas, para escarnio y desvalorización del otro, para dejar expuesto lo privado, lo personal.Una cultura que, queriendo sacarse la careta, llega a excesos impensados. La sutileza ha dejado su lugar a lo explicito. La delicadeza a la grosería. La compe-tencia es la pátina del accionar cotidiano. De la pa-labra a la acción. El humor es de grueso calibre y la ironía es cruel.

La frivolidad es materia corriente, al igual que la desproporción. La circulación de la palabra no ga-rantiza el razonamiento o la argumentación. La in-formación es el chisme, el rumor; la documentación veraz circula sólo en los ámbitos académicos. Con este cóctel se conforman subjetividades que portan niños y adultos. Adultos que están cansados por hor-as de trabajo y presiones de todo tipo, que luchan por mantener su nivel económico o de subsistencia; adultos que no tienen tiempo para otra cosa que no sea descansar o distraerse de las tensiones cotidia-nas; que luchan por la edad, la apariencia, que “se matan” para estar en forma ¿Esos son los adultos que tienen que ponerse a reflexionar con sus hijos sobre lo que se ve en la televisión?¿Qué espacios reales de revisión de sus vidas tienen, sin deprimirse? ¿Quién puede con ellos contener y encauzar el pensamiento desde la experiencia de vida? Porque, convengamos, no se puede vivir en el consultorio del psicólogo…Por otro lado, ¿podemos apropiarnos de modelos alternativos de comportamiento social?’ ¿Están al al-

cance de la mano de los actores sociales para poder comparar y confrontar pautas de comportamiento y los supuestos que subyacen?Lo colectivo como vía de conformación de estilos sociales también se ha roto, el individualismo lo sustituye. El otro, la otredad, se declama, pero los es-pacios de compartir se diluyen. Y si existen, la queja y la catarsis toman su lugar, dejando la reflexión a un costado.

No hay leyes ni control de las instituciones que cam-bien los modos de sentir, pensar y actuar de loa su-jetos sociales. Es la sociedad toda la que exige cam-bios, cuando los siente propios. La defensa de los derechos humanos en nuestro país es el resultado de la experiencia de su vulneración. Experiencia vis-ceral de su vulneración.Los cambios tecnológicos y sociales de este siglo no han tenido aún un registro en la sociedad para pro-tegerse y conducir reflexivamente su tendencia.Si somos capaces de interrogar a la realidad, bus-cando los supuestos que se esconden en sus men-sajes y propuestas de vida, tal vez empecemos a recorrer el camino que nos incluya como actores de cambio; pero es necesario hacerlo colectivamente, para que sea efectivo.

La escuela puede tomar un lugar, una cierta respon-sabilidad ante el uso de las TICS (Tecnologías de la Información y la Comunicación), mas no puede ni debe hacerse cargo del cambio cultural al que nos ha empujado el capitalismo salvaje.Esto requiere de un trabajo coordinado de todas las fuerzas sociales, acordando pautas de vida y mo-delos de comportamiento en los que el énfasis esté puesto en los vínculos humanos.Los que vivimos en pequeñas comunidades tene-mos el espacio adecuado para repensar nuestras representaciones, para plantearnos preguntas y analizarlas también con criterio valorativo.

“un espacio de contencion sin prejuicios para que puedas ponerte en contacto con vos mismo/a y con la vida. situaciones de crisis o con-fusión, necesidad de cambio, mo-mentos de la vida dificiles de tran-sitar, duelos, pérdidas, perdida del sentido de vivir”

Consultor en psicología Gustavo O.R. Fernandez.Estados Unidos y 24 de noviembre

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Descalzos, en el terreno sagrado de la memoria

Sandra Hojmaan

Te invitan a la casa del fariseo. Y allí mismo, pronunciás tus “ay” (Lc 11,37-54.12,1-7). Te mueve esa impresio-nante libertad que no transa, esa firmeza con que sostenés la herencia de tantos testigos que no se dejaron seducir por la lógica del imperio. No te silencia el contexto, más bien po-tencia tu palabra.

Hacés memoria de los profetas; te descalzás y esperás que otros se descalcen, en el sagrado te-rreno de la sangre derramada, del dolor sobre los huesos y la vida renaciendo desde las grietas.Con vos, quiero pronunciar mi “presente” por los torturados de ayer y de hoy, por “los que aún estamos vivos” y no queremos dormir ningún sueño de los justos, sino estar bien despiertos en este presente, de luces y sombras, de logros y cuentas pendientes.

Los argentinos celebramos 30 años ininterrum-pidos de democracia. Un acontecimiento que nos impulsa a mirar el pasado con ojos que construyen futuro; que nos reclama mantener vivos los sueños de tantos y tantas que regaron con su sudor, sus lágrimas y su sangre este suelo que quiere ser fecundo.Tantos brotes han surgido de ese riego. Tanta vida fue abonándose en lo oscuro, que hoy vuelve a florecer en el compromiso militante. “Todo lo que ustedes han dicho en la oscuri-dad será escuchado en pleno día, y lo que han hablado al oído, en las habitaciones más ocul-tas, será proclamado desde lo alto de las casas”.

Saboreo que nuestros hijos no han nacido de un repollo, ni son sólo fruto de un efecto político y cultural, sino que nacen de las entrañas de este fuego que se mantuvo ardiendo incluso en las catacumbas...

“No teman a los que matan el cuerpo”.Cuánto nos debemos todavía, cuando la vida está tan desvalorizada, “se venden cinco pájaros por dos monedas”: trata de personas, narcotrá-fico creciente, cuerpos humanos en la basura, gente en situación de calle, el atropello a los pueblos originarios, el castigo a los recursos naturales...

Hacer memoria de los profetas es reconocerlos buena noticia, de fidelidad: a sí mismos, a las causas que les dieron sentido, al cuidado de la vida devaluada. Mucho más que porque sean víctimas, porque son para nosotros Evangelio vivo y pascual. En tu nombre, el del Dios de la fraternidad y la justicia, de la mesa redonda. En el nombre de esta tan potente verdad de que es-tamos hechos del mismo barro y el mismo alien-to y que no caben, no queremos, jerarquías que la oculten o la violenten. “Somos todos hijos de la misma historia”, hijos de María y de las Madres, de todos los que protegen y multiplican la vida.