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JIMSON

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La superdotación intelectual es un tema

de creciente interés, que se pone de

manifiesto no sólo en la gran abundancia

de investigaciones donde se aborda esta

temática, con diversas publicaciones

periódicas de investigación y difusión

científica, y en una amplia oferta de libros

especializados,.

Hoy en día el alumno superdotado está

considerado como un "alumno con

necesidades educativas especiales", lo

que supone promover una respuesta

educativa que responda a estas

necesidades, y dotar a la escuela de los

recursos personales y materiales que

sean necesarios para desarrollar de forma

efectiva esa atención.

Las necesidades de los alumnos más

capaces constituyen otra manifestación

de necesidades educativas especiales y,

por lo tanto, dichos alumnos son

tributarios de las ayudas complementarias

que puedan requerir a lo largo de su

proceso de escolarización.

Sin embargo, como comentaremos a lo

largo de la exposición, la atención

adecuada a las personas de altas

capacidades no se limita sólo al campo

del conocimiento, sino que requiere

interesarse en toda su persona y su

entorno.

El primer problema que se

plantea es el de la definición,

¿qué entendemos por

superdotado? Se han propuesto

diversos modelos explicativos,

que hacen referencia a unas

características atribuidas al

superdotado.

Se basa en las capacidades, que

definen la superdotación como un

alto grado de inteligencia. Dentro de

este modelo caben dos enfoques; el

unidimensional, cuya figura más

relevante es Terman (1925), quien

popularizó y difundió el concepto de

cociente intelectual (CI).

Aunque son varios los autores que

asumen este posicionamiento, citaremos

aquí como ejemplo a Gadner (1993),

quien propone el concepto de

“inteligencias múltiples”, apelando a siete

tipo de inteligencias: lingüística, musical,

lógico-matemática, viso-espacial,

corporal-kinestésica, intrapersonal e

interpersonal.

Aunque hoy sabemos que están además

la espiritual, ecológica, naturalista.

Enfatiza los componentes cognitivos. En este caso, la inteligencia equivale al funcionamiento mental, como capacidad de manipular, almacenar, memorizar o recuperar la información.

Se establece cinco criterios para que una persona sea considerada superdotada: criterio de excelencia, criterio de productividad, criterio de valor, criterio de rareza (originalidad)y criterio de demostración.

Se puede denominar orientado al

rendimiento y tiene en Renzulli (1976),

con su modelo de “los tres anillos”, su

máximo exponente. Este autor describe la

superdotación como la interacción de

capacidades generales por encima de la

media, altos niveles de implicación en la

tarea y altos niveles de creatividad.

El sociocultural. Desde este enfoque, la

superdotación implica diversos factores,

entre los que se incluye el medio. Así,

Tannenbaun (1983) considera los

siguientes factores: habilidad general,

habilidad específica, factores no

intelectivos, factores sociales y un

componente de suerte u oportunidad.

La respuesta a esta pregunta no es simple. Los estudios actuales indican que la varianza genética explica un 51% de la varianza fenotípica (Juan-Espinosa, 1997), quedando el resto explicado por varianza ambiental en lo que a inteligencia se refiere.

No todas las diversas capacidades tienen la misma carga genética; así, por ejemplo, la Capacidad Viso-espacial tiene más influencia genética que Aptitudes Verbales o Memoria, lo que parece un claro apoyo al modelo de inteligencias múltiples.

La existencia de estas definiciones variadas de superdotación tiene implicaciones tanto teóricas como prácticas.

Las primeras son las que centran el debate, muy antiguo por otra parte, entre herencia y medio: ¿el superdotado nace o se hace? Las derivaciones prácticas de los diversos modelos definitorios llevan a los criterios que permiten detectar y diagnosticar, lo más acertadamente posible, a las personas superdotadas.

Las investigaciones realizadas en los

años 1980 y 1990 ha proporcionado datos

que apoyan la noción de múltiples

componentes de la inteligencia.

Esto es particularmente evidente en el

nuevo examen de los "dones" de

Sternberg y Davidson en su edición

"Concepciones de la Superdotación".

Las concepciones diversas de la

sobredotación, aunque distintas, están

relacionadas entre sí de varias maneras.

La mayoría de los investigadores definen

la sobredotación en términos de múltiples

cualidades, no todos los que son

intelectuales.

La puntuaciones de CI son a menudo

vistos como medidas inadecuadas de

sobredotación.

La motivación, un elevado autoconcepto

y la creatividad son cualidades clave en

muchas de estas concepciones más

amplias de la superdotación intelectual.

Las inteligencias múltiples han sido

asociadas a la superdotación o

superación de algunas áreas de

desarrollo (Colangelo, 2003). Las

inteligencias múltiples ha sido descritas

como una actitud hacia el aprendizaje, en

lugar de técnicas o estrategias (Cason,

2001)

La habilidad intelectual no debiera ser sólo el

resultado de una serie de puntuaciones en

una prueba intelectual.

. La "perseverancia", en definitiva, es uno de

los rasgos inherentes a la mayoría de las

definiciones sobre superdotados, definida

como "afán de logro" y "devoción" hacia sus

específicas áreas de interés.

Por último, los sujetos superdotados

muestran, también, altos niveles de

creatividad.

Hay ocho inteligencias, o diferentes zonas en las que la gente asimila o aprende sobre el mundo que les rodea: 1. interpersonal,

2. intrapersonal,

3. corporal-kinestésica,

4. lingüística,

5. lógico-matemática,

6. musical,

7. naturalista,

8. espacial

9. y visual.

Un alto grado de dedicación a las tareas.

Altos niveles de creatividad

Los sujetos superdotados poseen una

capacidad intelectual superior a la media,

aunque no tienen forzosamente que ser

extraordinariamente inteligentes.

En este sentido cobra importancia el

procedimiento o la forma en que se

calcula o mide la habilidad intelectual.

La persona inteligente "nace y se hace",

es decir, la inteligencia tiene dos

componentes:

lo innato: las distintas aptitudes.

lo adquirido: adquisición de conocimientos y

entrenamiento.

Desde el primer día del nacimiento

sostiene la cabeza.

Se sostienen de pie a los seis meses.

Andan sin ayuda a los nueve meses.

Tienen gran agilidad y coordinación

motriz.

Dicen la primera palabra a los seis meses.

Dicen la primera frase a los doce meses. Mantienen una conversación entre los 18

y los 24 meses. Aprenden los colores a los 18 meses,

incluso en sus diferentes tonalidades. Preguntan por palabras nuevas que no

conocen a los 3 años, empleando la palabra exacta en el momento oportuno.

Es la curiosidad lo que les lleva a aprender.

Aprenden a leer antes de ir a la Escuela o en muy corto

período de tiempo y muestran un alto interés por la lectura.

Aprenden el abecedario a los 2 años y medio.

Comienzan a leer a la edad de 3 años.

Aprenden a partir de una lectura funcional (conocimiento de

determinados logotipos y anagramas). Utilizan continúas

preguntas entre las que destaca: ¿qué pone aquí?. No

preguntan por las letras sino por las palabras.

No deletrean ni silabean en el aprendizaje, aprenden “de

corrido”.

Aprenden a escribir normalmente en mayúsculas pues el

trazo es más sencillo.

Cuentan hasta 10 a los 2 años y medio.

Con 3 años y medio resuelven a nivel

mental problemas de suma y resta con

números hasta el 10.

Aprenden a contar el tiempo en horas a

los 5 años.

Prefieren para los juegos, actividades que

no supongan `riesgos’.

No les suelen gustar los deportes de

mayorías.

Los hobbies preferidos son la lectura, la

escritura, el dibujo, hacer puzzles, etc.

Se relacionan mejor con niños más

pequeños o más mayores.

No es cierto. La creencia de que el superdotado es el alumno que saca todo sobresalientes y las mejores notas es un gran error.

Puede ser que el superdotado, en algunos casos, saque buenas notas, pero en muchos otros suspende, llegando incluso a repetir curso.

Ser más inteligente de lo normal no ha de ser motivo de envidia. Esto es otro error.

Una inteligencia elevada no sirve de nada si no se utiliza, y por el contrario, al ser inhibida y no poder expresar su alto potencial, puede dar lugar a graves problemas.

Aunque tiene sus ventajas, son más los inconvenientes en países donde esta especial condición no es atendida, y donde el sistema educativo no contempla educación especial para ella; en este caso casi todo son obstáculos, quedando las ventajas inexistentes en su mayoría.

Que un superdotado pueda hacer muchas

cosas solo, no significa que no necesite

ayuda, aunque no sea en el proceso de

aprendizaje, sino en otros ámbitos, tal

como el de la motivación.

Un superdotado que no recibe la

educación especial que necesita y que no

recibe la motivación adecuada , no puede

desarrollar ese alto potencial que posee, y

lo que podría ser una ventaja, se

convierte en un gran problema.

Ni los superdotados son una minoría privilegiada, porque carecen de privilegios aunque sean una minoría, ni es perjudicial en absoluto para la sociedad que se les dé la educación especial que necesitan y puedan desarrollar su alto potencial , porque es algo en beneficio de todos, los primeros ellos mismos, y para nada perjudica a nadie.

El ser diferente supone para el superdotado una carga, porque esa diferencia no es aceptada, ni comprendida, ni tolerada por los demás.

Al contrario de lo que se cree, el superdotado tiene tantos obstáculos con los que se enfrenta, que lo que podría suponer una ventaja, un inteligencia mucho más alta que la del resto, se convierte en un problema.

Un sistema educativo totalmente inadecuado, al que no pueden adaptarse

Una sociedad que, por desconocimiento del tema, por incultura, y por ignorancia, les ataca, les muestra indiferencia, y no apoya en absoluto su talento.

La envidia de la que son objeto, y que suele ser en la mayoría de los casos con intención destructiva hacia ellos.

La incomprensión a la que se ven sometidos.

La marginación, por ser considerados raros y

no compartir generalmente sus intereses.

La constante competencia con ellos,

producto de una sociedad con complejos de

inferioridad en una gran mayoría.

El sentimiento de soledad, por ser una

minoría que no es reconocida ni bien

aceptada socialmente, teniendo que ocultar

que son superdotados, si no quieren ser

objeto de ataques y desprecio por parte de

los demás.

Los programas de intervención se centran

fundamentalmente en el niño o la niña

superdotados, si bien en ocasiones tienen

un alcance más amplio y abarcan también

a su familia.

La mayoría de los programas tienen un enfoque fundamentalmente académico, sobre todo los que se desarrollan en países con mayor tradición en ocuparse de los más dotados

Formación reglada

IntegraciónAceleración

Adaptación curricular

AgrupamientoTotal

Parcial

Extraescolar

Durante el cursoDespués del horario escolar

En fines de semana

Cursos especialesCampamentos de verano

Periodos vacacionales

Algunas evidencias nos muestran que los aspectos socio afectivos son de gran importancia en su desarrollo. Desde el bien conocido fenómeno de la disincronía, que supone un desarrollo desigual entre la capacidad intelectual y otros factores, especialmente los emocionales y que explica el no encontrarse a gusto con personas de su edad, pasando por problemas socio afectivos, como el llamado “estigma de la superdotación” (Cross y Coleman, 1993)

La intervención con el ambiente es menos

usual, pero también hay programas

dedicados a la familia.

La justificación de los mismos es que los

padres no siempre saben lo que es mejor

para sus hijos de altas capacidades y

precisan formación e información para el

apoyo de su actividad educadora.

Las reflexiones sobre la necesidad de apoyar a niños y niñas superdotados para contribuir a su desarrollo integral, nos indujo a plantear un modelo de intervención con una perspectiva integradora y social, poniendo en marcha el Programa Integral para Altas Capacidades, que va dirigido tanto a niños y niñas superdotados, como a sus progenitores.

Como hemos comentado, el campo de estudio de la superdotación presenta, todavía, puntos de controversia.

Los más importantes los hemos señalado en estas páginas: definición, peso de la herencia y el medio, la identificación y diagnóstico de la superdotación, la estabilidad de estas capacidades y el reto de un rendimiento acorde a sus posibilidades.

El peso que los factores sociales tienen, indiscutiblemente, para un desarrollo adecuado de la superdotación en talento, hace necesario prestar una atención específica a este colectivo.