Orosio y las Herejías Hispanas

1Anuario Brigantino 2012, n 35

OROSIO Y LAS HEREJAS HISPANAS: EL PRISCILIANISMO Y EL ORIGENISMO(INTRODUCCIN BIOGRFICA Y BREVE ANLISIS DEL CONMONITORIO)

* Francisco Jos Lamas Noya, de Avils, estudi Filologa clsica e Historia y ciencias de la msica en laUniversidad de Oviedo. Ha publicado diversos trabajos de Historia (La conspiracin de los mariscales; Elmundo espartano), literatura (Mitografa comparada: Los orgenes de Roma; Comentario sobre losprrafos XVIII - XXVII del libro segundo de Las memorias sobre la Guerra de las Galias de Gayo JulioCsar) y msica. Actualmente dirige la seccin musical de Crisol, cuadernos de historia, en Onda Pees.

Orosio y las herejas hispanas:el Priscilianismo y el Origenismo

(Introduccin biogrfica y breve anlisis del Conmonitorio)

FRANCISCO JOS LAMAS NOYA*A la memoria de mi madre, que, espero, haya podido conocer la verdad ofalsedad de lo que aqu se comenta. Con profundo agradecimiento a D.Alfonso Gonzlez, profesor titular de Lengua y literatura latina del I.E.S.Carreo Miranda, Avils, por la paciencia demostrada y las interminableshoras dedicadas a la ingrata tarea de corregir estas lneas.

SumarioEl presente trabajo trata de la vida de uno de los personajes ms significativos y desconocidos de laliteratura occidental en general y de la gallega en particular: Orosio. Con especial inters en su pococonocida y muy controvertida biografa y su combate a dos herejas que en ese momento estabanfuertemente asentadas en la Gallaecia e Hispania: El priscilianismo y el origenismo; a travs delanlisis de su obra Commonitorium.

AbstractThe present work deals with the life of one of the most significant and unknown figures in Westernliterature in general and in particular in Galician, Orosio. With special interest in his not well knownand controversial biography and the combat to two heresies which at the time were heavily settled inGallaecia and Hispania: The Origenism Priscilianism and through his work Commonitorium.

I.- EN TORNO A LA BIOGRAFA DE OROSIOAntes de comenzar a leer, es conditio sine qua non, advertir que la biografa de Orosio

se mueve en el puro campo especulativo. Nada sabemos con certeza de este escritor,incluso lo que creemos conocer con exactitud est sujeto a controversia. De hecho podemosafirmar, sin caer en la exageracin, que los datos que conocemos sobre su vida son tanescasos que pueden ser contados con los dedos de una mano, y sobraran. Tanto es asque se puede aseverar en justicia que slo sabemos que vivi, estuvo en frica, dondeconoci a San Agustn y estuvo en Jerusaln. Como bien explica Ursicino Domnguez delVal: Tenemos poca informacin, y adems imprecisa, ambigua en ocasiones, que lleva lapluma de los escritores a conclusiones divergentes. [] la biografa de Orosio necesitaramucha ms luz, ms tal vez que otros casos, para explicar los hechos bsicos de su vida.[] una parte importante de la actividad de nuestro autor se mueve en el terreno de lahiptesis1; o Eustaquio Snchez Salor La biografa de Orosio se encuentra, en efecto,casi en su totalidad, envuelta en una oscuridad impenetrable; slo unos pocos aos, queno llegan a un lustro, aparecen perfectamente iluminados y encuadrados en la historia desu tiempo 2 Sin embargo veamos un poco ms en torno a nuestro autor, aunque slo seade modo especulativo.


FRANCISCO JOS LAMAS NOYA

I.1 SOBRE EL PRAENOMENLa primera noticia que poseemos del praenomen Paulus referida a Orosio se encuentra

en Jordanes (Quos Getas iam superiori loco Gothos esse probavimus, Orosio Paulodicente)3 (Ya hemos demostrado ms arriba, basndonos en el testimonio de Paulo Orosioque estos getas son los godos)4. En esta cita, Jordanes se refiere a Orosio. Hist. I. 16.2Modo autem Getae illi qui et nunc Gothi5 (En cambio, ahora, tratndose de los queantes se llamaba Getas y hoy llamamos Godos6. Esta obra de Jordanes fue escrita en unparntesis durante la redaccin de Romana, que se escribi entre el 1 de abril de 550 yel 31 de marzo de 551.7 Ms de un siglo posterior a la desaparicin de Orosio en Menorca.Tambin corrobora este Praenomen el fragmento de cdice con obras de Orosio de laBiblioteca Laurentiana de Florencia, datado en el siglo VI por Zacaras Garca y Villada8,Pauli Orosii, lib. V. explicit 9 (Termina el libro V de Paulo Orosio).

Arnaud Lindet achaca el praenomen a un error en la ordenacin del nombre, asOrosius P pasara a P Orosius, con lo que de Orosius P(resbyter) pasara a P(aulus)Orosius, y apoya su argumentacin en el hecho de que ni San Agustn ni San Jernimollaman al escritor otra cosa que Orosio10. Como bien argumenta Torres Rodrguez, estoresponde a la costumbre de la poca, as el propio Orosio cita a los autores clsicos con unsolo nombre, por ejemplo: Claudio por Claudio Cuadrigario; Valerio por Valerio Anciate;Cornelio o Tcito (slo) por Cornelio Tcito o Pompeyo por Pompeyo Trogo. Esta opcintambin es avalada, entre otros, por Martnez Cavero11.

Tambin apunta Torres Rodrguez que Orosio puede ser su nombre indgena mientras quePaulo sera el de bautizo o de ordenacin presbiteral12. Esta idea est, tambin, apoyada porArnaud Lindet, que dice que Orosius no es un nombre latino y que puede ser un derivado delgriego D (monte), E (lmite), o, con mayor probabilidad, un nombre brbaro latinizado13I.2 SOBRE EL LUGAR DE NACIMIENTO

Cuatro son los lugares que se disputan el honor de ser la cuna del historiador: Braga,Tarragona, La Corua y Bretaa.I.2.1 La hiptesis bracarense

Los principales testimonios a favor de esta hiptesis los tenemos en loscontemporneos del escritor, de manera ms concreta en San Agustn (Epp. 166 y 169),Avito, presbtero bracarense, (Ep. Ad Palchionium y De inuentione) y Braulio de Zaragoza(Ep. 44 ad Fructuosum). En ellas se dice:

-San Agustn. Ep. 166 ad Hieronymum. Ecce uenit ad me religiosus iuuenis, catholica pacefrater, aetate filius, honore compresbyter noster Orosius, uigil ingenio, paratus eloquio,flagrans studio, utile uas in domo Domini desiderans, ad refellendas falsas perniciosasquedoctrinas quae animas Hispaniorum multo infelicius quam corpora barbaricus gladiustrucidarunt. Nam inde ad nos usque ab oceani littore properauit, fama excitus quod a meposset de his quae scire uellet, quiquid uellet audire. (Ha llegado hasta m un joven religio-so, hermano en la paz catlica, hijo por su edad, compresbtero nuestro por dignidad,Orosio, despierto de ingenio, pronto de palabra, entusiasta en su celo, deseando ser instru-mento til en la casa del Seor para refutar las falsas y perniciosas doctrinas que hanquebrantado las almas de los hispanos con mucho ms dao que la espada brbara a suscuerpos. Desde que lleg hasta nosotros procedente del litoral del ocano, se entusias-m con la fama de que poda escuchar de m lo quera saber, cualquier cosa que fuera. 14)



-E insiste el obispo cartagins: Ep169 ad Evodium, 13. Occasionem quippe cuiusdamsanctissimi et studiosissimi presbyteri Orosii, qui ad nos ab ultima Hispania, id est, abOceani littore, solo sanctarum Scripturarum ardore inflammatus advenit, amittere nolui.(No he querido perder la ocasin que me proporcionaba Orosio, un joven presbtero muysanto y muy estudioso, que lleg hasta nosotros desde la orilla del ocano, inflamado slopor la pasin de las Santas Escrituras.15)A este respecto hay que hacer una pequea aclaracin. Aunque en latn nunca estuvo

muy clara la diferencia entre Oceanus, Mare y Ponto, San Agustn, que posea unaimportante cultura literaria no poda dejar de referirse al Ocano tal como nosotros loconocemos, ya que ocano era, segn la opinin mayoritaria de los escritores clsicos enla lengua del Lacio, Mare magnum, quo tota cingitur terra16

-San Braulio de Zaragoza. Ep. 44.s ad Fructuosum Cavete autem dudum illius patriaevenenatum Priscilliani dogma: quo et Dictinum et multos alios, ipsum quoque sanctumOrosium invenimus fuisse infectum, quamvis postea a sancto Augustino correctum Pro-vincia namque quam incolitis et Graeciam sibi originem defendit quae magistra estlitterarum et ingenii; et ex ea ortos fuisse recordamini elegantissimos et doctissimos viros(ut aliquos dicam), Orosium presbyterum. (Por otra parte, guardaos de la doctrina dePrisciliano, en otro tiempo veneno de este pas. Hemos hallado que con ella fueron infecta-dos Dictino y muchos otros, incluso el mismo Orosio, aunque despus fue corregido porsan Agustn En efecto, la provincia que habitis tambin reivindica como su fundadoraa Grecia, que es la maestra de las letras y del ingenio; y nosotros recordamos que de ellasurgieron varones muy distinguidos y sabios, por citar alguno (entre otros), el pres-btero Orosio).17-Avito de Braga: Epistola ad Palchonium. Itaque, beatissimi dilectissimique fratres memo-riam vestri incessabiliter agens et tam congruentem ordinantis Dei dispositionem videns,promptus fui de presbytero cui revelatum fuerat partem aliquam inventi corporis promere-ri, quam festinato expetitam secretoque perceptam ad vos dirigere non distuli. Quamobremmisi vobis per sanctum filium et compresbyterum meum Orosium reliquias de corporebeati Stephani primi martyris. (Y as, santsimos y amadsimos hermanos, llevando ince-santemente vuestro recuerdo y observando una pauta de actuacin tan conforme a loordenado por Dios, anduve presto para merecer, del presbtero a quien haba sido revelado,una parte del cuerpo encontrado, la cual, solicitada urgentemente y recibida en secreto, nome he demorado en dirigrosla. Por esto, os he enviado a travs de mi santo hijo y compres-btero, Orosio, las reliquias del cuerpo del bienaventurado Esteban, el primer mrtir) 18

I.2.2 La hiptesis tarraconenseA favor del origen tarraconense slo existe un dato. En sus Historiae adversus

paganos, el escritor, en VII. 22, 8:Extant adhuc per diversas provincias in magnarum urbium ruinis parvae et pauperessedes, signa miseriarum et nominum indicia servantes, ex quibus nos quoque in HispaniaTarraconem nostram ad consolationem miseriae recentis ostendimus (An existen en lasdiversas provincias, entre las ruinas de grandes ciudades, pequeos y pobres poblados que,conocidos slo sus nombres, conservan las seales de estos males, entre los cuales pode-mos incluir, en Hispania, nuestra Tarragona, para consuelo de las recientes desgracias) 19.



I.2.3. La hiptesis Brigantina.Esta teora, esgrimida por Janvier en 1982 en La gographie dOrose, est basada en

el hecho de que, en el excurso geogrfico que hace en las Historiae adversus paganos elescritor cita en dos ocasiones la localidad, mientras que slo cita una vez Roma y nunca serefiere a Constantinopla. Por otra parte no cita ninguna de las maravillas tradicionales delmundo antiguo y s hace referencias al faro de La Corua.I.2.4. La hiptesis bretona.

Postulada por Marie Pierre Arnaud Lindet en 1990 en su introduccin a la versinfrancesa de las Historias20. Este supuesto se basa en que, en la geografa, que tambinsirve de base para la hiptesis brigantiana, Orosio nombra Hibernia y Mevania (Irlanda yla Isla de Man), pero no, como otros territorios, localizndolas en relacin a los vientos ylas regiones vecinas siguiendo las divisiones administrativas, sino que demuestra unpreciso conocimiento de la regin. Adems dice que sus habitantes son los escotos.Segn Arnaud Lindet, si aceptamos que huy Orosio son los escotos. Pudo haberestado preso en Hibernia hasta su fuga a Hispania, donde entrara por Brigantia.I.2.5.Argumentos contra estas hiptesis.

Existen argumentos contra todas estas opiniones, que repasaremos brevemente.-Contra BragaEsta hiptesis es la que ms se ha intentado rebatir. Ursicino Domnguez del Val afirma

que en ningn modo puede afirmarse, como cierto, que Braga sea su ciudad natal. Eltestimonio augustiniano lo mismo puede entenderse de Braga que de Orense, por ejemplo;y Braulio habla de Fructuoso, presbtero an, y cuya formacin y primera actividad no sehace en Braga, y Braulio escribe precisamente en esa primera etapa fructuosiana. Por otraparte el convento jurdico de Braga no era slo la ciudad de Braga.21

Por su parte, Eustaquio Snchez Salor expone aunque parezca, de las palabras deAgustn, que en su viaje hacia frica parti de las costas atlnticas y no de las mediterrneas,y est, asimismo, claro, por el testimonio de Braulio, que era un hombre ilustre de Galicia,ello no quiere decir, sin embargo, que naciese necesariamente en Braga: pudo haber nacidoen Tarragona y estar en Braga en el momento en que huy de Espaa.22

-Contra TarracoContra la hiptesis tarraconense dice Pedro Martnez Cavero Este Tarraconem nostram

es el nico argumento a favor del nacimiento tarraconense de Orosio. []. G. Fainckpiensa que Orosio utiliza aqu una metonimia; si situamos el pasaje en su contexto, el autordescribe la irrupcin de los brbaros y desea asociar Espaa a este drama.23 A esterespecto contesta Robles24 que Fainck, por defender el nacimiento en Braga, considera laexpresin de Orosio Tarraconem nostram como metonimia, mientras que no hace lo mismocon el testimonio de Avito.

-Hiptesis Brigantina y Bretona.Estas dos opciones tienen, a juicio de los estudiosos, el mismo inconveniente: la falta

de indicios slidos, aunque, en opinin del abajo firmante, tienen la misma consistenciaque el origen tarraconense. De hecho, la autora de la hiptesis bretona apoya, comosegunda opcin, la candidatura coruesa.

Como ha podido apreciarse la opinin de los especialistas est dividida, especialmenteentre los que apoyan la hiptesis de Braga y la de Tarragona, la tesis brigantina y la



bretona slo estn apoyadas por sus respectivos autores, aunque Martnez Cavero afirmaque La hiptesis es sugestiva, y nada se opone a que Orosio naciese en Brigantia y queformara parte de la iglesia bracarense25 aunque despus rechaza esta hiptesis y terminapor unirse a la propuesta de Braga.

Entre los estudiosos que se unen a la hiptesis bracarense debemos destacar a IbezSegovia26, Davids27, Deferrari28, Corsini29, Snchez Salor30, Domnguez del Val31, MartnezCavero32, Fuentes de la Rosa33 o Torres Rodrguez34.

Entre los que apoyan la tesis tarraconense destacan Trithemio, Barionio, Ceillier,Havercamp, Delmeses y Roz35, de Mrner36y de Labriolle37.

Concluye Snchez Salor. La idea de que naci en Tarragona es la ms comn entre lacrtica relativamente antigua, mientras que la hiptesis de que naci en Braga es mscomn entre autores modernos38

Nosotros, a falta de mejores hiptesis, nos unimos a la opinin del origen bracarensepuesto que nos parece la ms fundada y, para nosotros, est demostrado que el origen desu viaje a frica est en Braga. As y todo no se debe perder de vista la afirmacin, antesexpuesta, de Snchez Salor y Domnguez de Val; efectivamente, pudo salir de Braga yhaber nacido en cualquier otra parte.I.3. SOBRE LA FECHA DE NACIMIENTO

La fecha de nacimiento de Orosio tampoco es conocida, sin embargo existen variosindicios. San Agustn llama a Orosio en la carta a Jernimo (Cfr. San Agustn. Ep. 169.)joven en tres ocasiones. Segn Benot Lacroix39 tendra unos cuarenta aos. Para ellose apoya en la legislacin hispana que exiga treinta y cinco aos para ser ordenadosacerdote, segn carta del Papa Siricio40 al Metropolitano de Tarragona y la de InocencioI41 a los obispos de Hispania. Sin embargo las disposiciones del Papa Silvestre42 al PrimerConcilio de Nicea43 prescriben una edad ms baja (treinta aos). Esta edad queda ratificadaen el Concilio Cartagins [] Presbyter trigsimo (anno) [] efficitur.44 y en elNeocesarense Presbyter ante tricesimum aetatis suae annum nullatenusordinetr45.Tambin establecen la edad de treinta aos los concilios Toledano II, canon 1,el VI canon 20, el Arelatense IV, can. 1 y el Agatense can. 16 y 17.

Los Papas Siricio e Inocencio, en las cartas antes citadas, hablan tambin delincumplimiento sistemtico de las disposiciones cannicas, lo que, para Torres Rodrguez46,podra indicar que esta norma no se cumpla de manera estricta.

Tambin confirma la juventud del escritor Avito, que era una generacin ms joven queSan Agustn. Cuando Orosio conoci al santo africano ste frisaba los sesenta y un aos,as que, si Orosio tuviese cuarenta no sera destacable. No cabe aquilatar demasiado laspalabras espontaneas de San Agustn. Orosio pudo ordenarse cannicamente a los treintaaos, quizs antes, puesto que en otras rdenes no se cumplan las disposiciones cannicaspor el conflicto priscilianista; pero aun ordenado a los treinta, no hay inconveniente enque dos aos despus emprendiese su viaje al frica; de modo que en el 414 415 en quevisita a San Agustn, tendra unos treinta y dos aos47 Segn esta idea, que es la msextendida, Orosio habra nacido, por lo tanto, entre 380 385, posiblemente 383, segnTorres Rodrguez48

Fainck sugiri en 1951 que Orosio habra llegado a frica hacia 410. As habra tratadodurante cinco aos con San Agustn, segn l, durante la redaccin de De Civitate Dei.Segn Fainck, si Orosio hubiese llegado a Hipona en 414, su trato con el santo cartagins



habra sido muy breve y San Agustn no le habra encomendado la misin en Palestina,como veremos ms adelante. Si este trato se hubiese iniciado, como sugiere Fainck, en410, el santo africano habra podido apreciar de primera mano la vala de Orosio; si no, sesigue preguntando Fainck, por qu el adjetivo studiosissimus cuando el Commonitoriumest lejos de ser un estudio serio?49

Sin embargo, ni Fainck ni Martnez Cavero aplican la continuidad, lgica por otra parte,a esta hiptesis. Si Orosio lleg, presbtero, a frica en 410 y no en 414, la fecha denacimiento debera ser retrasada en al menos 4 aos. As la fecha de 380 385, que escommunis opinio, habra que retrasarla hasta 376, como muy pronto; sin embargo, estaidea de Fainck s es perfectamente aplicable a la edad propuesta por Benot Lacroix, aunquellega a ella por otros medios. Pero trataremos este tema con mayor profundidad en elsiguiente epgrafe.

Contra la idea de Fainck, se suele argumentar con las palabras de san Agustn (cfr.Ep.169). Sin embargo no puede dejar de parecernos interesante la idea de Fainck.I.4 PRIMER VIAJE A FRICA

Aqu est uno de los muy escasos puntos que conocemos con cierta seguridad sobrela vida de Orosio.

Sabemos que en la primera mitad de la dcada de 410 Orosio llega a Hipona. Comoveamos en el epgrafe anterior, la mayor parte de los estudiosos est de acuerdo en quefue en 414 cuando llega a frica, sin embargo a nosotros nos parece ms convincente lateora esgrimida por Fainck de la llegada en 410. Segn la cronologa de Hidacio, lospueblos germanos invaden la pensula entre 409 y 414. La teora de Fainck se basa en elsiguiente pasaje del propio Orosio:

-Orosio. Historiarum adversum paganos. III 6 7. Cum tamen, si quando de me ipsorefero, ut ignotos barbaros viderim, ut infestos declinaverim, ut dominantibus blanditussim, ut infideles precaverim, ut insidiantes subterfugerim, postremo ut persequentes inmari ac saxis spiculisque adpetentes, manibus etiam paene iam adprehendentes repentinanebula circumfusus evaserim. (Si a propsito de m mismo comento esto es para decircmo me vi en un primer momento frente a los brbaros, desconocidos para m, cmo evita los que me eran hostiles, cmo adul a los que tenan autoridad, cmo supliqu a losinfieles, cmo me sustraje a sus insidias y, finalmente, cmo escap, envuelto en unarepentina niebla, y me puse a salvo cuando me perseguan por mar y me buscaban con suspiedras y sus lanzas, y como estuve a punto de caer e sus manos 50

Tambin se basa en la carta de San Agustn a San Jernimo vista ms arriba. Sinembargo dice Martnez Cavero, refirindose a Orosio. Hist.III. 20, 6 7. De atenerosnicamente a este dato tendramos que fijar esta salida tan dramtica en el momento de lainvasin de Galicia por los brbaros entre 409 y 411. Sin embargo, debemos pensar que lafuga no fue inmediata. Orosio ha tenido tiempo de conocer las debilidades de sus enemigos,sabe halagarlos cuando es preciso, sabe protegerse de ellos y sabe negociar con ellos51.Para ello cita el siguiente texto:

-Orosio. Historiarum adversum paganos. VII. 41, 4 5. Quisque egredi atque abirevellet, ipsis barbaris mercennariis ministris ac defensoribus uteretur. Hoc tunc ipsi ultroofferebant, et qui auferre omnia interfectis omnibus poterant particulam stipendii ob mer-



cedem servitii sui et transvecti oneris flagitabant. Et hoc quidem a plurimis factum est.(Quien quisiera escapar o marcharse poda servirse de los propios brbaros como mercena-rios, servidores o defensores. Ellos mismos se ofrecan voluntariamente y stos, que hubie-ran podido apoderarse de todo tras matar a todos, se contentaban con una mdica compen-sacin como precio por sus servicios y carga transportada. Lo que ciertamente fue hechopor muchos)52.Sin embargo, las trabas que objeta Martnez Cavero a la teora de Fainck, desde nuestro

punto de vista, no son tales, ya que, como refleja la historia contempornea reciente, sepuede, perfectamente, aprender a tratar con elementos hostiles en menos de un ao, no esnecesario que pase un lapso de tiempo tan prolongado como proponen la mayora deestudiosos para lograrlo. Adems, si durante cinco aos consigui mantenerlos alejadode su figura por qu tuvo que salir tan precipitadamente de la pennsula? Adems, comodice el propio escritor en Hist. V. II, 1. Mihi autem prima qualiscumque motusperturbatione fugenti. 53 (Yo, sin embargo, que aprovecho para huir la primera perturbacinde una situacin turbulenta, sea esta del tipo que sea) 54 Si nos atenemos a la idea expresadapor Martnez Cavero, y hacemos caso de la veracidad del texto orosiano, querra decir quelos Vndalos no hicieron nada que fuese contra el derecho romano en los primeros aosde la ocupacin de Hispania y que, de pronto, sintieron la necesidad de perturbar y oprimira la poblacin autctona.

Otro hecho controvertido es el motivo de su viaje. Existen dos opciones claras: El viajede estudios y la huida.

En el primer apartado se sita Torres Rodrguez, que nos dice: La emigracin deOrosio en busca de luz, que robustezca su fe y aumente su caudal cultural en el ordenreligioso, es un hecho normal y muy en boga, de acuerdo con lo que se estila en el ltimotercio del siglo IV y primero del V.

Todos los escritores que conocemos, como Egeria, los Avitos de Braga, Hidacio, Toribio,Baquiario fueron emigrantes en busca de conocimientos, con que afianzar y esclarecer sufe, de aumentar su bagaje cultural y de satisfacer su impulso emocional. El propio Priscilianoy algunos de sus adeptos tambin emigraron y murieron fuera de Galicia. S. Fructuosotambin intent ir a Oriente, pero lo impidi Chindasvinto [] Generalmente los puntos dedestino solan ser Roma, o Palestina. En esto Orosio es un caso especial, pues emigra alfrica. La explicacin es obvia; aqu estaba Agustn, foco de primera magnitud, nos slode su tiempo, sino en todos los tiempos del Cristianismo Occidental [] Tambin porqueera la regin libre de los brbaros.55 Tambin se sitan en esta teora Lippold i barbarinon fosse che lo stimolo decisivo per un viaggio gi de tempo progettato56 (los brbarosno fueron sino el estmulo decisivo para un viaje programado hace tiempo), Benot Lacroix57,Vilella, quien afirma una huida de Orosio (hecho muy probable) no implica que el galaicono tuviera ya ms o menos decidida su ida a Hipona para recabar informacin ydocumentacin acerca de diferentes cuestiones doctrinales defendidas y cuestionadasen su pas En este sentido, su ida a frica sera parangonable con el viaje realizado porsus conciudadanos [los Avito].58

Todos estos autores se basan, en mayor o menor medida, en Consultatio sivecommonitorium Orosii ad Augustinum de errore priscillianistarum et origenistarum,sobre cuya redaccin se hablar ms adelante en el apartado dedicado a dicha obra. Enesta obra Orosio explica a San Agustn, de manera marginal, ya que no es el objetivoprincipal de la obra, el motivo de su venida a frica. Segn l, se debi a la intervencin de



la providencia y para poder instruirse a su lado. Si embargo, como ya vimos antes, en lashistorias dice en varias ocasiones lo contrario.

Concluye Martnez Cavero: Qu nos autoriza a pensar que Orosio oculta la verdadcuando refiere su misin? [] Ha sido engaado Agustn? Por otra parte, no si aceptamosque Orosio ha convivido con los brbaros varios aos no olvidemos que hemos dichoque llega a frica en 414-, su huda no pudo ser por un miedo repentino, sino que hay quepensar en una escapada circunstancial, de unos ignoti brbaros, de los que huy en unaocasin propicia.[] Asimismo, si comparamos la actitud de Orosio con la de suconciudadano Avito de Braga, comprobamos que, mientras l se lamenta de no poderregresar a Hispania a causa de los brbaros, por el contrario, aprovecha la oportunidadextraordinaria de la presencia de Orosio junto a l, y le entrega las reliquias de Esteban,sabedor de que las pona en buenas manos para hacerlas llegar a la Gallaecia. 59

Desde nuestro punto de vista, estos argumentos de Martnez Cavero tienen dos errores.El primero es fechar la llegada de Orosio en 414, en vez de en 410 como s hace Fainck, acuya opinin nosotros nos hemos unido en el apartado anterior. El segundo es equipararla importancia que pueda tener un presbtero recin ordenado como Orosio y un obispocomo Avito. Por otra parte, si hubisemos aceptado, que no lo hacemos, la fecha de lallegada de Orosio a frica, el tiempo transcurrido entre su partida y la entrega de lasreliquias por parte de Avito sera muy breve (poco ms de un ao), sin embargo, si aceptamos,como hacemos, la teora de Fainck de que lleg en 410, el lapso de tiempo resulta cincoveces mayor, lo suficiente como para que los nimos contra l, un simple presbtero, ya sehubiesen calmado y, por ello, podra albergar la esperanza de un pronto regreso.

La segunda opcin viene avalada por Corsini y Snchez Salor, entre otros. Corsini,lapidario, afirma que fue una vera e propria fuga60 (una autntica y propia fuga). SnchezSalor tambin opina lo mismo Es evidente que se pueden conciliar las dos razones. Laautntica y nica razn es la segunda que hemos apuntado: la huida de manos de losbrbaros61. Para la razn que, ante San Agustn, expone Orosio hay que tener en cuentaque el santo cartagins haba criticado a los obispos y dems pastores que abandonabanel rebao a su suerte ante la llegada de los brbaros.

En nuestra opinin, resulta ms verosmil la segunda opcin que la primera.I.5. VIAJE A PALESTINA. CONCILIO DE JERUSALN Y ATAQUE A PELAGIO

Lo que s sabemos con cierta seguridad es que, una vez en frica, y antes de 415,escribi el Commonitorium, ya que San Agustn le responde, en 415, con el Ad Orosium,contra Priscillianistas et Origenistas. Decimos que, por fuerza, esta obra fue escrita enfrica porque, segn el comienzo de la misma, ya haba tratado el tema con San Agustn.Por ello no vemos ningn reparo en aceptar la fecha tradicional de 414.

Tras este hecho, San Agustn afirma que no tiene nada ms que ensearle en esecampo y lo manda a Jerusaln para que estudie con San Jernimo, a la sazn residente enBeln, tras la toma de Roma por Alarico en 410. Orosio llega ese ao 415 a la ciudad santay es invitado a participar en el Concilio de Jerusaln, celebrado en julio, para juzgar a lasdoctrinas de Pelagio. Esto desencadena un grave conflicto entre el Obispo Juan deJerusaln, protector de Pelagio, y San Agustn y San Jernimo, que hablaban porrepresentacin de Orosio. Del lado de Orosio se situaron los obispos Eros de Arls yLzaro de Aix. Los hechos acaecidos en este Concilio sern revisados ms adelante en elepgrafe dedicado al Liber Apologeticus.



El da tres de diciembre de 415 tuvo lugar, por parte del presbtero Luciano deCafargamala, el descubrimiento del lugar de descanso de San Esteban, el primer mrtir.Avito de Braga pidi al futuro historiador que portase consigo parte de esas reliquias y lasllevase a Gallaecia.I.6. REGRESO DE PALESTINA, CONCILIO DE CARTAGO Y DESAPARICIN ENMENORCA

Orosio abandon Palestina entre los ltimos das de 415 y principios de 416, en cualquiercaso siempre tras el 26 de diciembre de 415, fecha de traslado y depsitos de las reliquiasde San Esteban. San Jernimo lo despidi con palabras de alabanza, virum honorabilemfratrem meum, filium dignationis tuae 62 (Hombre muy honorable, hermano mo e hijo detu dignidad).

Durante este viaje hizo, como en la ida, de mensajero, portando consigo cartas y librosdiversos, entre ellos tenemos conocimiento de:

-La carta a Palconio, ya citada, de Avito de Braga.-Las reliquias de San Esteban y la Inuentio que las autentificaba.-La Epstola n 134 de San Jernimo para San Agustn (en la que afirma que quiere hacerfrente comn con l contra la causa pelagianista. Mihi autem decretum est te amare,suscipere, colere, mirari tuaque dicta quasi mea defender (Pues he decidido amarte,aceptarte, honrarte, admirarte y defender tus proposiciones como si fuesen mas) 63-Un libro de San Jernimo sin especificar para que Ocano, discpulo de San Jernimo,hiciese una copia para San Agustn.-Una epstola de los obispos Eros y Lzaro, de la Galia, para Aurelio de Cartago y el cleroafricano. En ella los obispos exponen los resultados del concilio de Dispolis y envan unacarta acusatoria contra Orosio.-Probablemente: Dialogi contra Pelagianos de San Jernimo, Epstola 133 del mismo autory su propio Liber Aplogeticus.Su regreso a frica debi realizarlo por tierra debido a los temporales que azotan el

mediterrneo en esa poca del ao. Casi con toda seguridad se detuvo en Alejandra.Indicio de esto es el hecho de que, siempre que habla de la clebre biblioteca, dice quaeet nos uidimus64 Este viaje debi durar unos tres meses, no ms.

En 416 participa en el Concilio de Cartago65 donde comunic los hechos vividos por len Palestina y entreg una carta de los obispos Eros y Lzaro66. En esta ciudad tambindebi entregar el libro que traa para su copia a Ocano.

Al concluir el concilio, Orosio parti hacia Hipona, donde se volvi a entrevistar conSan Agustn. Cuando Orosio parti de Palestina la situacin era muy tensa, pero an no sehaban producido los incidentes de mayor gravedad: el incendio de los dos monasteriosde San Jernimo en Beln por parte de los pelagianistas. Cuando estas noticias llegaron africa provoc la encendida reaccin de San Agustn que predic un sermn acusatoriocontra Pelagio:

-San Agustn: Sermo contra Pelagium. S. 348A 6. Nunc uero audiuimus eundem ipsum, quiprinceps et auctor huius perniciosi dogmatis dicebatur, in orientalibus partibus gestisepiscopalibus absolutum et canonicum pronuntiatum. Propterea quae illi obiecta sunt,negauit sua esse, et quod per eius doctrinam allii spargere uidebantur, non sentire senegauit, sed etiam anathemizauit. Gesta quidem ad nos nondum per uenerunt. Veruntamen,



quia solemus ei tamquam seruo dei familiariter scribere, ut ipse nobis, priore anno, cumfilius meus presbyter Orosius, qui nobiscum est ex Hispania seruus dei, isset ad orientemcum litteris meis, scripsi per eundem ad eundem Pelagium, non eum notans litteris meis,sed exhortans audiret a presbytero quod mandaui. Verum autem presbyter locum ipsum ubiille erat iam illius praedicationibus et fratrum disensionibus perturbatissimum inuenit; inderetulit ad me litteras sancti multumque [pro] nobis pro merito aetatis et sanctitatis eteruditionis uenerandi presbyteri Hieronymi, omnibus noti. Hic autem presbyter Hierony-mus iam contra illum etiam liberum arbitrium scripserat, qui et nobis adlatusest. Ille uero, sicut dixi, gestis ecclesiasticis absolutus est, confitens gratiam dei quamuidebatur negare et oppugnare disputationibus suis (Ahora verdaderamente hemos odo ase mismo [Pelagio], que es considerado el principal y el autor de este pernicioso dogma,absuelto y proclamado cannico en las regiones orientales por las actuaciones de los obis-pos. Porque neg que fuesen suyas aquellas cosas que le fueron expuestas, y lo que otrosparecan divulgar como su doctrina no slo neg que lo pensara sino que incluso lo anatemi-z. Ciertamente, las actas an no nos han llegado. Sin embargo, puesto que solemos escri-birle tanto en su condicin de siervo de Dios como de forma privada, igual que l a nosotros,habiendo marchado a Oriente el ao anterior con cartas mas mi hijo el presbtero Orosio,siervo de Dios, que est con nosotros procedente de Hispania, escrib a travs de l a esemismo Pelagio, no para que le diera cuenta de mis cartas sino exhortndolo a que escucharadel presbtero lo que le haba confiado. Sin embargo, el presbtero encontr ya perturbad-simo por sus predicaciones y las disensiones de los hermanos el mismo el mismo lugardonde l estaba. Por ello me trajo cartas del santo y muy venerable por nosotros a causa desu edad, santidad y erudicin, presbtero Jernimo, conocido por todos. Este presbteroJernimo ya haba escrito contra l, por su libre decisin, un libro que asimismo nos fuetrado. Verdaderamente aqul, como he dicho, ha sido absuelto por las actuaciones eclesisticasconfesando la gracia de Dios que pareca negar y rechazar en sus disertaciones) 67

Es durante estas fechas, por peticin de San Agustn, cuando redacta su obra msimportante: Los Siete libros de Historia contra los paganos, pero sobre estos trataremoscon mayor profundidad en el apartado dedicado a dicha obra.

En 417, una vez redactadas las Historias, Orosio abandona frica para volver a Hispania.Sin embargo, sin que sepamos por qu, recal en Menorca. De esto es testimonio unacarta encclica del obispo Severo de Menorca.

-Severo de Menorca. Carta Encclica. 4 y 31. 4. Namque, diebus paene eisde quibus egotanti sacerdotii nomen, licet indignus, adeptus sum, presbyter quidam, sanctitate praeci-puus ad Hierosolima ueniens, Magonae non longo tempore immoratus est, qui, postquamtransuehi ad Hispanias, sicut desiderabat, nequiuit, remanere denuo ad Africam statuit.Hicbeati martyris Stephani reliquias, quae nuper reuelatae sunt, cum ad Hispanias portareconstituisset, ipso sine dubio marture inspirante, im memorati oppidi ecclesia collocauit.(En efecto, casi en estos das en que yo, aunque indigno, he recibido la fama de tan gransacerdote, un presbtero que, preeminente por su santidad y procedente de Jerusaln, sedetuvo en Mahn durante un tiempo no muy largo. ste, despus de no poder pasar aHispania, como era su deseo, decidi regresar de nuevo a frica. Por eso, las reliquias delbienaventurado mrtir Esteban, recientemente descubiertas, como haba concebido llevarlasa Hispania, las deposit en la iglesia de la mencionada ciudad, lo que hizo sin duda porinspiracin del mrtir).31. Haec beatitudo uestra die quarto nonarum februariarum uirtute Domini nostri Iesu-christi arrepta, octo diebus ad eodem consummata esse cognoscat, post consulatum dominiHonoii undecimum et Constantii iterum, uiri clarissimi.



31. Vuestra Beatitud sepa que esto68 fue iniciado prodigiosamente por el poder de Nuestroseor Jesucristo el cuarto da de las nonas de febrero, y cumplido por l mismo en ocho das,despus del decimoprimer consulado del seor Honorio y segundo de Constancio, varnilustrsimo).La misiva fue escrita tras la salida de Orosio de la ciudad, con lo que es deducible que

su estancia en la misma fue breve. Esta carta ha sido puesta en duda por Blumenkranz yDaz y Daz69 que la consideran una falsificacin del siglo VII, cuando tuvo lugar unafuerte disputa sobre la conversin de los judos de la isla. Sin embargo la mayora deestudiosos son partidarios de su autenticidad.

Existen serias dudas respecto al depsito de las reliquias en Mahn. Por qu ibaOrosio a depositar las reliquias en Menorca cuando estaban destinadas a su dicesisnatural, Bracara, por peticin del Obispo Palconio?

Segn Martnez Cavero70, las reliquias de San Esteban no fueron mostradas en Hiponapor qu las las habra dejado en Mahn y, por el contrario, haber impedido su visin a sumentor San Agustn? Sin embargo, segn Torres Rodrguez71 las reliquias fuerondepositadas en frica del Norte, donde obraron varios milagros.

Tras su estancia en Menorca perdemos todo rastro de Orosio. Existen demasiadasteoras sobre sus ltimos das que resultara demasiado prolijo comentarlas todas, sinembargo citaremos alguna de las ms interesantes:

- Lacroix72y Tillemont73, seguido por Fainck Errera74, afirman que partes de las reli-quias de San Esteban fueron entregadas por Orosio a Uzala, ciudad en la que se estableci.Aunque esto entra en contradiccin con la carta de Severo de Menorca.- Torres Rodrguez75, hacindose eco del nico testimonio que habla del final de Orosio,un texto de Genadio de Marsella76 que dice [hablando de Orosio] claruit extremo peneHonorii imperatoris tempore, propone que Orosio regres a frica y continu con elsanto cartagins hasta la muerte del obispo de Hipona, aunque, extraado del prolongadosilencio orosiano, tambin propone la alternativa de su fallecimiento temprano por culpadel clima norteafricano.- Martnez Cavero77 78 propone la que, para nosotros, es la ms plausible de las posibi-lidades: que Orosio desapareciese en el mar tras salir de Menorca de regreso a frica.Tambin refiere, aunque de modo meramente anecdtico por su imposibilidad, que, durantela Edad Media, se afirmaba que no desapareci en el mar, sino que arrib a Hispania en elCabo de Palos, donde fund un monasterio, a unos doce kilmetros de distancia del cabo: elmonasterio de San Gins de la Jara.Para Fainck Errera el hecho ms interesante es la falta de noticias sobre el Presbtero

que se produce en San Jernimo y, especialmente, en San Agustn. Para l se debe a que,durante su estancia en Uzala (recordemos que l opina que Orosio se qued en Menorca),Orosio fue el inspirador de Semipelagianismo. Esto vendra apoyado por el hecho de queGenadio de Marsella, un pelagianista, dedica ms espacio en su obra al elogio de Orosioque al de San Agustn. As y todo ya hemos referido que, en nuestra opinin, la versinms plausible es que el presbtero bracarense desapareciese en el mar de vuelta a frica.I.7. A MODO DE CONCLUSIN

Como comentbamos al comienzo de este breve estudio biogrfico de Orosio, es muypoco lo que sabemos sobre el escritor, pero esta informacin resulta imprescindible para



poder entender, no tanto la mayor de las obras de Orosio, las Historias contra los Paganos,sino sus, para nosotros, mucho ms interesantes obras menores: el Commonitorium y elLiber Apologeticus.CAPTULO II: COMMONITORIUM

La pennsula ibrica fue, tradicionalmente, una tierra libre de influencias herticas. ElConcilio de Elvira79 alude a herejes, aunque no especificaba cules. No existen huellas degnosticismo80 ni montanismo81. Lucilia, que favoreci la causa donatista82, no era hispana.Paciano, obispo de Barcelona, se vio obligado a escribir contra Simponiano, un abogado,que era novaciano83. El arrianismo lleg a la pennsula de la mano de Potamio y Osio, sinembargo no se arraig hasta Eurico en 466 y desapareci con la conversin de RecaredoI en 587. Por todo esto podemos afirmar que la primera hereja que se implanta en Hispania,al menos de manera poderosa, es el Priscilianismo. Cmo hemos visto en el captuloanterior, la principal preocupacin de Orosio durante su vida fue el Priscilianismo, por lotanto creo conveniente hacer un breve repaso a la vida de Prisciliano y la doctrinapriscilianista.

II. 1. MOTIVO Y FECHA DE REDACCIN DEL COMMONITORUMEl motivo de redaccin de esta obra est claro: pedir consejo a San Agustn acerca de

la conducta a seguir para poder acabar con el priscilianismo en la Gallaecia. Esta obra fueredactada a peticin de San Agustn, en torno al ao 414, cuando Orosio llevaba unoscuatro aos en frica, a raz de las conversaciones mantenidas por el santo africano y elpresbtero bracarense, como afirma el propio Orosio:

Orosio: Commonitorium I. Iam quidem suggesseram sanctitati tuae, sed commonitoriumsuggestae rei tunc offerre meditabar, cum te expeditum animo ab aliis dictandi necessitati-bus esse sensissem. Sed quoniam domini mei, ilii tui, Eutropius et Paulus episcopi, eademqua et ego puer uester salutis omnium utilitate permoti commonitorium iam dederunt dealiquantis haeresibus, nec tamen omnes significarunt, necesse fuit me festinato edere etcoaceruare in unum omnes perditionum arbores cum radicibus et ramis suis et offerreignienti spiritui tuo, ut tu uiso agmine perspectaque nequitia permetiaris, quam possisdispositionem adhibere uirtutis.84 (Orosio al santsimo Padre el obispo Agustn. Sin dudaya lo he expuesto a tu Santidad, pero ahora estoy meditando ofrecerte un conmonitorio delo expuesto, al haber entendido que tal vez ests libre de otras obligaciones de gobierno.Pero, puesto que mis seores e hijos suyos, los obispos Eutropio y Paulo, llevados por elmismo servicio a la salvacin de todos, por el que tambin yo, como hijo vuestro, soyllevado, ya informaron sobre algunas herejas, pero no las sealaron todas, fue necesario quetomara buena cuenta con rapidez, amontonara en uno solo todos los rboles de las perdicio-nes, con sus races y ramas, y los expusiera al fuego de tu espritu, a fin de que, una vezhubieras visto el tropel y examinado su maldad, sopesaras qu disposicin de firmezapodras aplicar)85.II.2. Pars prima. De errore priscillianistarum. En torno a Prisciliano y el Priscilianismo.Afirman Presedo Velo, Codoer Merino, Blanco Freijeiro y Elorza Guineam86 que

Prisciliano es uno de los personajes ms apasionantes del Bajo Imperio, cuya fuertepersonalidad, muy discutida, ha dado pie a las interpretaciones ms contradictorias, ya en



la antigedad, como afirmaron San Ambrosio (Epist. XXVI, 3) y San Jernimo (Vir. Inl.,121). O como afirma Manuel Sotomayor87: Mucho se ha escrito sobre el tema, y raramentesin pasin. Parece increble que unos mismos hechos puedan ser interpretados de manerasno slo tan distintas, sino tan contradictorias, y que los mismos testimonios sean tandiversamente estimados por quienes pretenden examinarlos solamente con la ecunimeobjetividad de la crtica histrica. As para Hingenfeld88, Kunstle89 y Garca Villada90esun hereje. Lpez Caneda91dice que fue el ltimo eco del neoltico y de su ambiente. ParaBarbero92 el priscilianismo es un movimiento econmico y social, para Paret93 es precursorde la Reforma. DAls94 y De Labriolle95 piensan que era un asceta heterodoxo, a lo que sesuma Babut96 afirmando que fue perseguido por su ascetismo riguroso.

Prisciliano nace en un lugar sin determinar de Hispania. Al ser de posicin elevada sepiensa que naci en Btica o Lusitania, aunque la fuerte aceptacin de sus doctrinas enGallaecia hace pensar a algunos autores que fuese esa su procedencia. Por nuestra partenos unimos a los que piensan que su origen es btico, ya que de esta zona provienen lasprimeras denuncias, como se ver, contra el heresiarca.

Prisciliano postulaba un fuerte ascetismo, entenda que los religiosos deban hacervoto de castidad y pobreza (hecho este importante teniendo en cuenta que, segn SulpicioSevero Prisciliano proceda de una familia noble muy rica97. Adems entenda quecualquiera, no slo los ordenados, poda ser intrprete vlido de las escrituras, de hechoorganizaba lecturas privadas y apoyaba la funcin de las mujeres como lectoras de lostextos sagrados. Adems, en su opinin, para tener una concepcin global del cristianismohaba que leer no slo los textos cannicos, sino tambin los textos apcrifos.

El priscilianismo fue un movimiento que intent hacerse con el control de las sedesepiscopales, el mejor medio para realizar la reforma que pretendan en el iglesia, y, de hechocont con dos Obispos, Salviano e Instancio, aunque, como dice Sotomayor, eran en suorigen un grupo de laicos que decidieron recibir el bautismo y rechazar las srdidastinieblas de las ocupaciones seculares para entregarse totalmente a Dios, movidos poraquello de que los que aman a alguien ms que a Dios no pueden ser sus discpulos 98.

Las primeras denuncias contra el priscilianismo vinieron de la mano de Higinio, obispode Crdoba, ante Hidacio, obispo metropolitano de Mrida. No poseemos informacinsobre el motivo y el tenor de la denuncia. Esta primera condena por parte del obispometropolitano oblig a Prisciliano a buscar apoyo en los libros sagrados y ha hacerprofesin de fe. Aunque esta acusacin sirvi para estrechar la relacin entre Priscilianoy los dos obispos antes citados (Salviano e Instancio). Hidacio, as y todo, los excomulg,por lo cual, segn los cnones del snodo de Elvira, no podan ser recibidos en comuninpor ningn otro obispo. Sin embargo la excomunin era ilegal, ya que, como argumentaronlos excomulgados, no haba sido precedida de un procedimiento regular.

La profesin de fe hecha por Prisciliano, Instancio y Salviano hizo que se les sumasenlos obispos galaicos. Incluso el obispo de Crdoba, otrora acusador de Prisciliano, Higinio,los recibi en comunin, desautorizando la excomunin hecha por el metropolitanoemeritense.

Estos hechos fueron juzgados en el Concilio de Zaragoza en el ao 380. De las actas deeste concilio se conservan ocho cnones:

1. Que las mujeres fieles no se mezclen en los grupos de otros hombres que no seansus maridos.2. Que nadie ayune los domingos ni se ausente de la iglesia en tiempo de Cuaresma.



3. Que aquel que reciba la eucarista y no la consuma all mismo sea anatema.4. Que ninguna falte a la iglesia en las tres semanas que preceden a la Epifana.5. Aquellos que han sido privados de la comunin por sus obispos, no sean recibidospor otros.6. Que se excomulgue al clrigo que para vivir licenciosamente quiere hacerse monje.7. Que nadie se llame doctor sin tener este ttulo.8. Que las vrgenes consagradas al seor no reciban el velo hasta la edad de cuarentaaos.99El Canon 1 hace referencia a la prctica antes citada de reunirse, tanto hombres como

mujeres, para hacer lecturas sobre las escrituras. Los cnones 2, 4 y 6 hacen referencia alascetismo propio de esta doctrina. Los priscilianistas se encerraban en sus casas en lasfechas sealadas, como si de judos en Sabbath se tratase. La prohibicin expresada en elcanon 3 puede ir dirigida tambin contra los priscilianistas, sea porque la prctica prohibidapueda presuponer en los que la practicaban el deseo de evitar el contacto o la comunincon , sea porque refleje una actitud maniquea, ya que los maniqueos seabstenan de comulgar del cliz porque condenaban el vino como un veneno del prncipede las tinieblas; sea, finalmente, por un odio a la carne o por un sentimiento docetista conrespecto al cuerpo de Cristo. La prctica de recibir la comunin en la mano y llevrsela asu casa para consumirla all durante la semana, es mencionada y aceptada por San BraulioMagno como costumbre conocida en Alejandra y en Egipto100 () La prohibicinintroducida por el concilio de Zaragoza pudo estar motivada por alguna de las razonesindicadas, pero tambin por otros abusos no conocidos. En todo caso, la prctica, comovemos por el testimonio de San Basilio, no presupone de por s ninguna actitudreprensible101 El canon 7 hace referencia a que Prisciliano era denominado doctor sinserlo (slo podan ser doctores los miembros de episcopado).

A este concilio acuden poqusimos obispos, diecinueve de la Galia e Hispania, entrelos firmantes debemos citar a Fitadio, segn Sotomayor, posiblemente Febadio de Agen;Delfn, obispo de Burdeos; Eutiquio, Ampelio, Auxencio, probable obispo de Toledo;Lucio, Itacio, obispo de Ossonoba102; Esplendonio, Valerio, posible obispo de Zaragoza;Carterio e Hidacio, obispo metropolitano de Mrida. Tambin particip el obispo Simposiode Astorga, pero abandon el concilio el primer da.

De los acusados, ninguno estuvo presente, probablemente saban que serancondenados de antemano.

Sulpicio Severo afirma que fueron condenados los obispos Instancio y Salviano y loslaicos Elpodio y Prisciliano, afirmacin corroborada por las actas del primer conciliotoledano, del ao 400, en el que se afirma que en el concilio cesaraugustano fueroncondenados algunos103. Sin embargo los priscilianistas afirman en el Liber ad Damasumepiscopum que no fueron condenados por el concilio ya que Dmaso, obispo de Roma,haba advertido al concilio de que se guardasen de condenar a nadie sin orlo y en suausencia. Esto, unido al hecho de que Hidacio no tomase ninguna medida contra lospriscilianistas, nos convence de que no hubo ninguna condena por parte del concilio.

Al regresar Hidacio a su dicesis tras el concilio fue acusado por un presbtero. Es enesta poca cuando Simposio, obispo de Astorga, apoya de manera decidida a Prisciliano.

Prisciliano, por su parte, para mejorar la situacin de inferioridad en que se encontrabacontra los obispos, fue consagrado obispo de vila por la plebe y los obispos Instancioy Salviano. No sabemos si el pueblo accedi empujado por los dos obispos priscilianistas,



lo que s conocemos es que, tan solo un ao ms tarde, el clero y el pueblo abulenseapoyaban de manera decidida a su obispo.

La situacin empeor al fracasar los intentos de acuerdo con el metropolitanoemeritense. Salviano e Instancio se encaminaron a Emerita Augusta para entrevistarsecon Hidacio, pero su entrada fue impedida por la plebe emeritense que los atac y golpecasi hasta la muerte.

Es en este punto cuando Itacio, obispo de Ossonoba, acus a Prisciliano de practicarmagia. Estas prcticas consistan en conseguir buenas cosechas para los campesinosconsagrando los frutos al sol y a la luna. Tambin lo acus de maniquesmo, acusacinesta que fue extendida por Hidacio a todos los seguidores de Prisciliano, con lo que laacusacin pas de eclesistica a civil, ya que el maniquesmo estaba condenado por lalegislacin imperial. Tambin afirm que su consagracin no era efectiva ya que el canonn LI del concilio de Elvira prohbe ordenar a un hombre que hubiera sido hereje maniqueo.As y todo, Hidacio no dej de buscar apoyo eclesistico y envi una carta a San Ambrosio,obispo de Miln, en la que explicaba la situacin y colocaba en el mismo grupo que a lospriscilianistas a Higinio de Crdoba, pero, curiosamente, exclua a Simposio y los obisposgalaicos. A la vez envi una peticin al emperador Graciano para que interviniese contralos tres pseudoobispos: Instancio, Salviano y Prisciliano. Lo que era falso a todas lucesen los dos primero, ya que no haban sido condenados ni depuestos por un Concilio.Graciano expuls a los tres de Hispania, con lo cual, acatando la orden, se dirigieron aRoma primero y a Miln despus para recurrir la sentencia. Dmaso no los recibi,seguramente para no verse implicado en un proceso de unos acusados, excomulgados porel metropolitano de Mrida, y que no se presentaron al Concilio de Caesaraugusta; lasmismas razones movieron a Ambrosio a no recibirlos. 104 San Jernimo, que era secretariode San Dmaso de Roma en esta poca, no los considera herejes, ya que afirma que unoslos tienen por gnsticos y otros no. Tras esto se dirigen a la capital imperial: Miln, donderecaban el apoyo del Magister Officiorum, Macedonio, que anul la orden de destierro ylos devolvi a sus dicesis.

Itacio, ante el apoyo logrado por los acusados, se refugi en Trveris, bajo la proteccinde prefecto de la Galia: Gregorio.

En la segunda mitad del ao 389 es elevado al solio imperial Mximo, al que acudiItacio renovando la acusacin de maniquesmo. El nuevo emperador orden que seconstituyese un concilio en Burdeos para juzgar los hechos. Los acusados por Itaciofueron: Higinio e Instancio (Salvanio haba muerto en Roma), obispos; Felicsimo y Armenio,clrigos; Aurelio, dicono; Latroniano, poeta; Tiberiano, retrico; Asarbo y Eucracia. Elconflicto se circunscribi a las dicesis lusitanas, acusadas de hereja, y a la de Crdoba,acusada de cisma. Estuvieron presentes como acusadores, Hidacio, Itacio y San Martn,obispo de Trveris. Y como acusados Higinio, Instancio y Prisciliano. Slo se escuch eltestimonio de Higinio, que fue depuesto de su dicesis. Por ello Prisciliano decidi apelaral poder imperial. Todos ellos fueron enviados, entonces, a Trveris. Itacio e Hidacioexigan la pena capital. San Martn de Tours intentaba que no hubiese derramamiento desangre. Todo esto indica que en la base de la acusacin de Itacio se encontraba un odioferoz a todo tipo de ascetismo, al igual que en la de Hidacio el miedo a que los obispos yfieles se escapasen al control del metropolitano. Para el obispo de Ossonoba todo ascetaplido y pobre en el vestir, por este solo hecho, era maniqueo, lo que prueba que lasacusaciones de Itacio carecan de base y eran totalmente ftiles.105 Dos obispos, Magno



y Rufo, convencieron al emperador, que deleg el proceso en el Prefecto del pretorio,Evodio, un hombre severo y de carcter spero. Se acus a todo el grupo de maniquesmo,a algunos de turpitudo y a Prisciliano de magia. Tertulio, Potamio y Juan confesaron susculpas y se les conden levemente. Prisciliano confes, bajo tortura (hecho inslito, yaque fue el primer obispo, desde que Roma se convirtiese al cristianismo, que fue torturado)haber estudiado doctrinas mgicas, celebrado reuniones con mujeres deshonestas y orardesnudo.

Evodio remiti el caso al emperador Mximo. Itacio, entonces, se abstuvo de intervenir.El emperador conden a muerte a Prisciliano, Felicsimo, Armenio, Asarbo, Aurelio,Latroniano y Eucrocia. Instancio, Tiberiano e Higinio fueron desterrados en Scilly.

En este momento comenz la hecatombe del clero hispano. San Ambrosio de Miln seapart de la comunin de los obispos de la corte y se la neg a los obispos que habanaceptado a Itacio e Hidacio. Teogonio retir su comunin a los itacianos por su conductadurante el juicio. Siricio, nuevo obsipo de Roma, protest ante el emperador por la condena.Itacio fue depuesto por un concilio, aunque no sabemos dnde se celebr. Hidacioabandon su dicesis. Los dos fueron desterrados.

El priscilianismo sera condenado como hereja por el Papa Inocencio I en 404 con suRegula fidei contra omnes hereses, maxime contra Priscillianistas (vase nota n 41)

Como hemos podido observar, el priscilianismo fue un movimiento que tuvo mltipleslecturas y una gran influencia en la historia eclesistica hispana.II.2.2. Acusacin de Maniquesmo y origen del alma

Orosio abre fuego contra los priscilianistas acusndolos de maniqueos, acusacintpica contra esta hereja. Esta acusacin debi ser hecha de manera oral. San Agustnremiti a Orosio a sus escritos contra los maniqueos, sin embargo Orosio recrudece en elConmonitorio su acusacin afirmando que el priscilianismo es peor que el maniquesmoporque apoyan su doctrina tambin en el Antiguo Testamento.

Orosio. Commonitorium. 2.1 Priscillianus primum in eo Manichaeis miserior, quodex ueteri quoque testamento haeresim confirmauit, docens animam quae a Deo nata sitde quodam promptuario procedere, profiteri ante deum se pugnaturam, instrui adoratuangelorum (En primer lugar, Prisciliano fue ms desgraciado que los maniqueos ya queconfirm su hereja tambin a partir del Antiguo Testamento, al sealar que el alma, quenace de Dios, procede de un depsito (promptuarium), declara ante Dios que combatiry es instruida con la exhortacin de los ngeles)106.

Este es uno de los 16 errores que Santo Toribio de Libana, obispo de Astorga, encuentraen el priscilianismo a mediados de este mismo siglo V. Segn Orosio, los priscilianistascreen que el alma es de origen divino, aunque no aclara si creen que es consustancial aDios. Las almas, a diferencia de lo afirmado por la iglesia107, son creadas por la divinidad yson guardadas en un depsito donde preexisten. Tras tener esta preexistencia dentro delpromptuarium, el alma es liberada y desciende a travs de los crculos celestiales. Paraque esto se produzca tiene que haber, previamente, jurado ante Dios que combatir lasfuerzas malignas. Tras el juramento los ngeles la instruyen en las doctrinas necesarias ycomienza su descenso a travs de los crculos celestiales. En estos crculos habitan losprncipes malignos que luchan por conseguir el dominio sobre el alma. De esta lucha surgeun prncipe vencedor que dominar el alma en cuestin y que impone una marca al cuerpo(quirgrafo).



-Orosio. Commonitorium. 2. 1. dehinc descendentem per quosdam circulos a principati-bus malignis capi et secundum uoluntatem uictoris principis in corpora diuersa contrudieisque adscribi chirographum (Desde aqu, descendiendo a travs de unos crculos escapturada por principados malignos, empujada hasta cuerpos diversos conforme a la volun-tad del prncipe vencedor e inscrita en stos como un precepto ( chirographum)).108 109

Este lastre del quirgrafo es la imposicin de un destino, la afirmacin por partepriscilianista de un fatalismo astrolgico. Sin embargo, segn Orosio, Cristo sald esecargo en nuestra contra cuando fue crucificado, como se desprende de las cartas de SanPablo a los Romanos 8.1- 2110, 8. 39111 y a los Colosenses 2, 13 15 112.

Sin embargo Orosio nos habla ms adelante, citando una carta de Prisciliano (que sloconocemos por el autor bracarense) que afirma la existencia de un quirgrafo divino, yaque el primer crculo por el que descienden las almas est gobernado por los patriarcas.

-Orosio. Commonitorium 2.2. Haec prima sapientia est in animarum typis diuinarumuirtutum intellegere naturas et corporis dispositionem. In qua obligatum caelum uidetur etterra omnesque principatus uidentur saeculi adstricti sanctor um dispositiones superare113.Nam primum Dei circulum et mittendarum in carne animarum diuinum chirographum,angelorum et Dei et omnium animarum consensibus fabricatum patriarchae tenent, quicontra formalis militiae opus possident, et reliqua (Esta es la primera sabidura: reconocer,en los tipos de almas, las naturalezas de los poderes divinos y la disposicin del cuerpo. Enesto parece el cielo comprometido, y la tierra y todos los principados del siglo parecen,coaligados, superar las disposiciones de los santos. En efecto, el primer crculo de Dios y elprecepto (Chirographum) divino de las almas que se han de enviar a la carne fabricado conlos consentimientos de los ngeles, de Dios y de todas las almas- lo tienen los patriarcas,que poseen el poder contra la obra de la milicia zodiacal ( formalis militiae), y lo dems)114

Segn esta carta de Prisciliano, dos son las cosas que debemos tener en cuenta en eltrnsito de las almas de su receptculo al cuerpo. 1) En las almas hay que reconocer lamultiplicidad de poderes divinos y que son los patriarcas, con un poder superior, los queimponen el quirgrafo divino. 2) En las almas no slo intervienen los patriarcas, sinotambin las estrellas, la tierra y los principados del siglo, sin que quede sin dilucidar lapreminencia de ninguno de ellos.

En su conjunto, estas afirmaciones tienen un fuerte sabor gnosticista115.Orosio acusa tambin al priscilianismo de afirmar la supeditacin del hombre a las

estrellas. Segn Orosio, las doce partes del alma estaran supeditadas a los patriarcas y lasdoce partes del cuerpo a los signos del zodiaco.

-Orosio. Commonitorium. 2.3. Tradidit autem nomina patriarcharum membra esse ani-mae, eo quod esset Ruben in capite, Iuda in pectore, Leui in corde, Beniamin in femoribus,et similia. Contra autem in membris corporis caeli signa esse deposita, id est arietem incapite, taurum in ceruice, geminos in brachiis, cancrum in pectore et cetera, uolens subin-tellegi tenebras aeternas et ex his principem mundi processisse. (As, transmiti la doctri-na de que los nombres de los patriarcas eran las partes del alma, porque Rubn estaba en lacabeza, Jud en el pecho, Lev en el corazn, Benjamn en los muslos, y as sucesivamente.Por otro lado, ense que los signos del cielo han sido dispuestos en las partes del cuerpo,es decir, el carnero en la cabeza, el toro en la cerviz, los gemelos en los brazos, el cangrejo enel pecho, etctera, pretendiendo que las tinieblas se comprendieran en cierto modo comoeternas y que de ellas surgi el Prncipe del mundo). 116



Priciliano, segn Orosio, explicaba esta ltima afirmacin recurriendo a los apcrifos.Esta era una de las ms graves acusaciones contra Prisciliano. Prisciliano utiliza paraapoyar su doctrina la Memoria apostolorum, en la que se hace una reinterpretacin deMateo 13, 3 9117.

-Orosio. Commonitorium 2.5. In quo etiam libro de prncipe humidorum et de principeignis plurima dicta sunt uolens intellegi arte, non potentia dei omnia bona agi in hoc mundo.Dicit enim esse uirginem quandam lucem, quam Deus uolens dare pluuiam hominibusprincipi humidorum ostendat, qui dum eam apprehendere cupit, commotus consudet etpluuiam faciat et destitutus ab ea mugitu suo tonitrua concitet. (En este libro tambin sedicen muchas cosas del prncipe de las sustancias hmedas y del prncipe del fuego, que-riando dar a entender que todas las cosas buenas se hacen en este mundo con el artificio deDios, y no con su poder. Dice as que la luz es una virgen que Dios, queriendo dar la lluviaa los hombres, muestra al prncipe de las sustancias hmedas, para que ste, al desearcogerla, excitado, sude copiosamente y produzca la lluvia y, al haber sido rechazado, de surugido surja el trueno)118.Este texto, segn explica Martnez Cavero, es ambiguo en ciertas partes, as arte, non

potentia Dei omnia bona agi in hoc mundo afirma que puede ser interpretado como quetodas las cosas sirven a Dios porque l las permite, aunque no todas hayan sido creadaspor l. Tampoco est errado nuestro autor cuando afirma que son distinguibles elementosmaniqueos el las dualidades y cmo debemos interpretar que el prncipe de las cosashmedas y el del fuego proceden de la materia, al igual que el prncipe del mundo.

II.2.3. Doctrina trinitaria.El priscilianismo afirma que las personas de la trinidad estn al mismo nivel. Haciendo

una comparacin marcial, Padre, Hijo y Espritu santo tienen el mismo empleo y los tresunidos forman el Cristo. Sin embargo Orosio no parece entenderlo as:

-Orosio. Commonitorium. 2,6. Trinitatem autem solo uerbo loquebatur; nam unionemabsque ulla existentia aut proprietate asserens sublato et patrem, filium, spiritum sanc-tum hunc esse unum Christum docebat. (Adems mencionaba la Trinidad con un solonombre, pues sostena la unin sin existencia ni propiedad algunas, y, quitando el y,enseaba que este Padre, Hijo, Espritu Santo era Cristo nico).Esto lleva a San Agustn a acusar a Prisciliano de Sabelianista, ya que estos afirmaban que

las tres personas eran la misma. Todo esto resulta una interpretacin sesgada y muy simplificadapor parte del presbtero hispano de la autntica doctrina de Prisciliano, que es mucho mscompleja, para poder incriminar a los priscilianistas ya que el monarquismo no era ortodoxo.II.3.1. Pars Secunda: De errore origenistarum. Doctrina de la creacin.

El origenismo expone una doctrina de la creacin para salvar las inquietudes de lascapas cultivadas del cristianismo conocedoras de la filosofa griega; como expone elpropio Orgenes , es para aquellos que, compartiendo nuestra fe, acostumbran a buscarrazones para creer y para aquellos que nos combaten en nombre de las herejas.119

Tambin debemos tener en cuenta que la doctrina de Orgenes es puramenteespeculativa, no dogmtica, de hecho expresa en varias ocasiones sus dudas sobre lo queest hablando.



Orgenes, basndose en Gnesis 1,31120 defiende la creacin ex nihilo. Para l, lamateria no es coeterna a Dios, sino que ha sido creada por l. Adems, en contra de lo quepensaban los gnsticos, la materia es bondad y no maldad. Este punto es importanteporque se relaciona con lo siguiente que vamos a tratar.II.3.2. Origen y preexistencia del alma

No existiendo ninguna teora ortodoxa sobre la materia, Orgenes afirma que el alma nopuede ser creada de la nada, ya que eso sera afirmar que la voluntad de Dios es la nada.Sin embargo, esto es rechazado por Orosio:

-Orosio Commonitorium 3,2. Remansit sola offensa de nihilo. Credere enim persuasumerat esse animam, non tamen persuaderi poterat factam esse de nihilo argumentantes, quiauoluntas Dei nihil esse non possit. Hoc paene usque ad nunc manet. (Permaneci slo laofensa sobre de la nada. Tenan la conviccin de que el alma exista, pero no se les podapersuadir de que haba sido creada de la nada, ya que argumentaban que la voluntad de Diosno puede ser la nada. Esta creencia an hoy tiene alguna vigencia) 121

Sin embargo, este sofisma es resuelto por San Agustn:-San Agustn. Ad Orosium. 2 y 3. utrum eam Deus (quoniam particulam uel defluxionemeius non esse iam constat) ex nihilo creasse dicendus sit, eo quod durum et impium uideaturuoluntatem Dei dicere nihil esse, quo uolente creata est 3 quia uoluntas creantis etiamsine materia sibi sufficit.

II.3.3. Presencia de la sabidura DivinaComo ya dijimos antes, Orgenes propone una doctrina religiosa para las clases

conocedoras de la griega. El mejor ejemplo de ello es este. Orgenes presenta el mundo delas ideas platnico como coeterno a Dios, y estas son asumidas por el Hijo. Segn l, todoel mundo, todas las cosas que hay en l, prexisten en la sabidura de Dios antes demanifestarse en el mundo real. Tal como lo explica Orosio:

-Orosio. Commonitorium 3,4. Primum omnia antequam facta apparerent, semper in Deisapientia facta mansisse dicentes hoc uerbo: Deus enim quaecumque fecit faciendo noncoepit (En primer lugar, que todas las cosas, antes de que aparecieran creadas, siempre loestuvieron el la sabidura de Dios, y lo decan con esta frase: cualquier cosa que hizo Dios,no comenz hacindola).122

II.3.4. Origen, naturaleza y purificacin de los espritus.Orgenes afirma que todos los espritus del mundo son creados iguales por Dios, y que

viven en su contemplacin. Pero, llegados a un punto, caen debido a la satietas de estacontemplacin. As comienzan su degradacin, llegando a tener una naturaleza propia enmedida de sus propias culpas. Todo esto viene de I Corintios 6,3123

-Orosio. Commonitorium 3,5. Deinde dixerunt angelorum, principatuum, potestatum,animarum ac daemonum unum principium et unam esse substantia, et uel archangelo uelanimae uel daemoni locum pro meritorum qualitate datum esse utentes hoc uerbo: Maio-rem locum minor culpa promeruit (Despus dijeron que el origen de ngeles, principados,potestades, almas y demonios era uno solo, y era tambin una sola su sustancia, y que al



arcngel, al alma o al demonio les fue concedido un grado por la cualidad de sus mritos,sirvindose de esta otra frase: la culpa menor mereci mayor grado) 124

Esta postura de Orgenes libra a Dios de cualquier tipo de defecto en la Creacin, yaque todos los espritus son creados iguales y se degradan por su propia culpa, no porparcialidad a la hora de ser creados.

Sin embargo, esta inmersin en la materia no se produjo en todos los casos, de hechoel diablo no la ha sufrido, sino que es un acto de la benevolencia de Dios. El mundosensible es una prueba, una posibilidad de redencin para el espritu. Es un lugar dondepurgar los pecados. Segn Orosio:

-Orosio. Commonitorium 3,6. Mundum nouissime ideo esse factum, ut in eo animaepurgarentur quae ante peccauerunt. (Dijeron tambin que el mundo fue hecho lo ltimo,para que en l se purificaran las almas que con anterioridad haban pecado). 125

El mundo, segn Orgenes es innecesario sin ese pecado de la preexistencia, y sin l nohabra sido creado.

II.3.5. La apocatstasisLa apocatstasis consiste en la redencin universal, todos los pecados sern redimidos

al final. Todos los espritus sern perdonados por la benevolencia divina. El castigo eternono existe y hasta el mismo demonio ser perdonado, pues la naturaleza original de lacreacin no es malvada.

-Orosio Commonitorum 3,7. Ignem sane aeternum, quo peccatores puniantur, neque esseignem uerum neque aeternum praedicauerunt dicentes dictum esse ignem propriae cons-cientiae punitionem: aeternum autem iuxta etymologiam Graecam non esse perpetuum,etian Latino testimonio adiecto, quia dictum sit: in aeternum et in saeculum saeculi postpo-suerut aeterno: ac sic omnes peccatorum animas post purgationem conscientiae in unita-tem corporis Christi esse redituras (Predicaron que el fuego, indudablemente eterno, conel que los pecadores son castigados, ni es fuego verdadero ni eterno, al decir que se llamfuego al castigo de la propia conciencia, y en cuanto a eterno, segn la etimologa griega,no significa perpetuo, incluso aadi un testimonio latino, porque se puso in aeternum etin saeculum saeculi; y que as, todas las almas de los pecadores han de volver a la unidad delcuerpo de Cristo)-Idem: Voluerunt etiam de diabolo asserere, sed non praeualuerunt, eo quod cum substan-tia in eo bona facta perire non possit exusta in totum malitia diaboli aliquando saluandamesse substantiam. (Quisieron incluso aseverarlo del diablo, pero no pudieron, ya queafirmaron que, como la sustancia buena que hay en l es imperecedera, una vez consumidatotalmente su malicia, la sustancia del diablo alguna vez podr salvarse) 126

II.3.6. Renovacin del sacrificio de CristoSe acusa a Orgenes de subordinar el Hijo al Padre, exagerando lo que dice Juan en

14,28127. Sin embargo Orgenes defiende que Padre e Hijo poseen la divinidad como bienpropio y de manera perfecta. Tambin explica Orgenes que el sacrificio de Cristo es universaly eterno y que no ha de ser renovado. Sin embargo, sus detractores, encabezados por SanJernimo, entienden que afirma que el sacrificio de Cristo ha de ser renovado y ha de ser



vuelto a crucificar para la salvacin de los demonios. Aunque s es cierto que Orgenespostula la doble resurreccin, una parcial: el Bautismo y otra completa: la resurreccinfinal. Fue entendida (la afirmacin) en sentido contrario por Jernimo () Jernimo loentiende como si Orgenes afirmara una dualidad de sacrificios, ya que Cristo debera sercrucificado nuevamente en el cielo a favor de los demonios128.II.3.7. Racionalidad de los astros

Aqu Orgenes se muestra novedoso respecto al cristianismo, tomando como base elTimeo de Platn (38e) en que afirma que las esferas tienen alma. A partir de ah Orgenesafirma que los astros son seres racionales. Los astros, entonces, seran seres espiritualescados, igual que el resto, por sus pecados de su estado contemplativo. Sin embargoOrosio no lo ve as, ya que primero afirma su posible corrupcin, les niega la posibilidad delibertad, ya que estn al servicio del hombre.

-Orosio. Commonitorium 3,9. Creaturam quoque subiectam corruptioni non uolentemintellegendam esse dicebant solem et lunam et stellas; et haec non elementarios esse fulgo-res, sed rationales potestates, praebere autem seruitium corruptioni propter eum, quisubiecit in spe (Deca tambin que el sol, la luna y las estrellas deban comprenderse comocriaturas sujetas a corrupcin y sin voluntad; y que estas no eran fulgores elementales, sinoracionales potestades y, sin embargo, ofrecan servicio a la corrupcin a causa de aqul quelas someti en la esperanza129) 130

NOTAS1 Domnguez del Val, Ursicino. Historia de la literatura latina hispano cristiana. Fundacin universitariaespaola. 1998.2 Orosio. Historias. Gredos. 1982. (introduccin, traduccin y notas de Eustaquio Snchez Salor).3 Iordanis, De Origine Actibusque Getarum. IX, 58. Fonti per la Stria DItialia. Istituto Storico Italiano peril Medio evo. 1991.4 Jordanes. Origen y Gestas de los Godos. Ctedra. 2001 (Introduccin, traduccin y notas de Jos MaraSnchez Martn).5 Torres Rodrguez, Casimiro. Paulo Orosio. Su vida y sus obras. Fundacin Pedro Barrie de la Maza, Condede Fenosa. 1985.6 Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit.7Snchez Martn, Jos Mara. Op. cit.8 Garca y Villada, Zacaras. Historia eclesistica de Espaa. Apud Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit.9 Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit.10 Arnaud Lindet. Marie Pierre, Orose. Histoires (contre les paens). Coll. Des Universits de France. LesBelles Lettres.. 1990. Apud Martnez Cavero, Pedro. Op. Cit.11 Martnez Cavero, Pedro. El pensamiento histrico y antropolgico de Orosio. Universidad de Murcia2002.12 Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit13 Arnaud Lindet. Marie Pierre. Op. cit. Apud Martnez Cavero, Pedro. Op. Cit.14 Martnez Cavero, Pedro. Op. Cit.15 Martnez Cavero, Pedro. Op. Cit.16 Forcellini, Egidio. Lexicon totius latinitatis. Vol III. Arnaldus Forni Excudebat. 1965.17 Martnez Cavero, Pedro. Op. Cit.18 Martnez Cavero, Pedro. Op. Cit.19 Martnez Cavero, Pedro. Op. Cit.20 Arnaud Lindet. Marie Pierre. Op.cit. Apud Martnez Cavero, Pedro. Op. Cit.


FRANCISCO JOS LAMAS NOYA21 Domnguez del Val, Ursicino. Op. cit.22 Snchez Salor, Eustaquio. Op. cit.23 Martnez Cavero, Pedro. Op. cit. (La cita de Fainck en San Agustn y Orosio. Estudios sobre la Ciudad deDios. El Escorial. 1956).24 Robles, L. El origen y la espiritualidad del alma; S. Isidoro, S. Agustn y la cuestin priscilianista. Escritosdel Vedat. 1971. apud. Domnguez de Val, Ursicino. Op. cit.25 Martnez Cavero, Pedro. Op. Cit.26 Ibez Segovia. Disertaciones eclesisticas por el honor de los antiguos tutelares contra las ficcionesmodernas. Zaragoza. 1981.apud Snchez Salor, Eustaquio. Op. cit.27 Davids. J. A. De Orosio et sancto Augustino priscillianistarum adversariis. Rotterdam. 1930. ApudSnchez Salor, Eustaquio. Op. cit.28 Deferrari. R.J. Paulus Orosius. The seven books of history against the pagans. Washington. 1964. ApudSnchez Salor, Eustaquio. Op. cit.29 Corsini.E. Introduzione alle storie di Orosio. Turn. 1968. apud Snchez Salor, Eustaquio. Op. cit.30 Snchez Salor, Eustaquio. Op. cit.31 Domnguez del Val, Ursicino. Op. cit.32 Martnez Cavero, Pedro. Op. Cit.33 Fuetes de la Rosa, Mara Luisa. Orosio y su tiempo. Coleccin Tesis Doctorales. Universidad Complutensede Madrid. 1990.34 Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit.35 Delmasses y Roz. Dissederatio histrica por la patria de Paulo Orosio. apud Snchez Salor, Eustaquio. Op.cit.36 De Mrner, Th. De Orosii uita eiusque Historiarum libris septem adversum paganos. Berln 1844.apud Snchez Salor, Eustaquio. Op. cit.37 De Labriolle, P. Histoire de la littrature latine chrtienne. Pars. 1920. apud Snchez Salor, Eustaquio. Op.cit.38 Snchez Salor, Eustaquio. Op.cit.39 Lacroix, Benot. Orose et ses ides. Institut dtudes mdivales. 1965. Apud Torres Rodrguez, Casimiro.Op. cit40 Obispo de Roma entre diciembre de 384 y el 26 de noviembre de 399. Escribi la primera decretalconservada. En 385 otorg poderes al obispo de Tesalnica para que nombrase obispos en Iliria, siendo steel primer vicariado apostlico. Excomulg a los obispos que denunciaron a Prisciliano ante Mximo por nohaber corregido y perdonado al hesiarca.Consagr la baslica de San Pedro.41 Obispo de Roma entre el 22 de diciembre de 401 y el 12 de marzo de 417. Fue el papa que orden que todoslos casos graves deban pasar por sus manos y se reservaba el derecho a intervenir en los dems. Actu contanta contundencia contra el priscilianismo y el pelagianismo que San Agustn afirm Roma locuta, causafinita. Durante el saqueo de Roma por las tropas de Alarico en 410 no se encontraba en la urbe. A su vueltadedic todos sus esfuerzos a reconstruir la ciudad. Escribi la Regula fidei contra omnes hereses, maximecontra Priscillianistas en el ao 404.42 Obispo de Roma del 31 de enero de 314 al 31 de diciembre de 335. Durante su papado se reafirma laprimaca de la sede romana, aunque Constantino deja claro que era un subordinado imperial. Durante supontificado se produjeron los concilios de Arls y Nicea.43 Lenzenweger, Josef (dir.). Historia de la Iglesia Catlica. Herder. 199044 Corpus Christianorum. VI, LXXXVII. Tvrnholt. 1970.45 Corpus Christianorum. VI, CI. Tvmholt. 1970.46 Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit47 Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit48 Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit49 Fainck, Guy. Paul Orose et sa concepcin de lhistoire. 1951. apud Martnez Cavero, Pedro. Op.cit.50 Martnez Cavero, Pedro. Op.cit.51 Martnez Cavero, Pedro. Op.cit.52 Martnez Cavero, Pedro. Op.cit.53 Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit.54 Snchez Salor, Eustaquio. Op. cit.55 Torres Rodrguez, Casimiro. Op cit.56 Lippold, Adolf. Paolo Orosio uno storico. Roma, 1979. Apud Torres Rodrguez, Casimiro. Op cit.



57 Lacroix, Benot. Op. cit. apud Martnez Cavero, Pedro. Op.cit.58 Vilella Masana, Josep. Biografa crtica de Orosio. JAC 43, 2000. Apud Martnez Cavero, Pedro. Op.cit.59 Martnez Cavero, Pedro. Op.cit.60 Corsini, Enrico. Op. cit. apud Martnez Cavero, Pedro. Op. cit.61 Snchez Salor, Eustaquio. Op. cit.62 San Jernimo. Epstola 134, 1. Apud Martnez Cavero, Pedro. Op. cit.63 San Jernimo. Epstola 134, 1. Apud Martnez Cavero, Pedro. Op. cit.64 Orosio. Hist. VI 15, 32. Normalmente, si no ha visto algo en persona afirma yo lo s, pero en este casodice las cuales tambin nosotros vimos.65 Concilio celebrado en Cartago en abril o mayo de 416, en el que se juzg el pelagianismo.66 Aurelio y otros. Ep. Ad Inoventium. Carta sinodal de los sesenta y ocho obispos participantes en elconcilio de Cartago de 416 al Papa Inocencio. compresbyter noster Orosius nobis litteras sanctorumfratrum et consacerdotum nostrorum dedit Herotis et Lazari67 Martnez Cavero, Pedro. Op. cit.68 La conversin de los judos de Menorca69 Daz y Daz, M.C. Severo de Menorca y la Altercatio Ecclesiae et Synagogae en Revista Espaola deTeologa n 17. 1957 apud Martnez Cavero, Pedro. Op. cit.70 Martnez Cavero, Pedro. Op. cit.71 Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit.72 Lacroix, B. Orose. Apud Domnguez del Val, Ursicino. Op cit.73 Tillemont. Mmoires II. 1965. Apud Domnguez del Val, Ursicino.74 Fainck Errera. San Agustn y Orosio. Esquema para un estudio de las fuentes de De ciuitate Dei. Estudiossobre la ciudad de Dios, II. 1956. Apud Domnguez de Val, Ursicino.75 Torres Rodrguez, Casimiro. Op. cit.76 Genadio de Marsella. De uiris illustribus. Apud. Torres Rodrguez,Casimiro. Op cit y Martnez Cavero, Op.cit.77 Martnez Cavero, Pedro. Op. cit.78 Martnez Cavero, Pedro. La desaparicin de Orosio en Menorca. Antigedad y cristianismo. Espacio ytiempo en la percepcin de la Antiged79 Concilio celebrado en la Hispania Baetica entre 300 y 324 (su fecha es incierta, aunque se tiende a fecharloal comienzo, normalmente entre 303 y 306, dado que el ao 307 fecha la conclusin del episcopado de SanPatricio de Mlaga, uno de los asistentes), cerca de Granada. Fue uno de los ms importantes conciliosprovinciales, junto con los de Arls y Ancira, todos ellos preparatorios del primer Concilio Ecumnico(Nicea I, 20 de mayo a 25 de julio de 325). Acudieron 19 obispos 26 presbteros, as como laicos, todos elloshispanos- Se reuni a peticin de Osio de Crdoba y fue presidido por Flix de Accitum (Guadix), el obispode mayor antigedad del concilio.Se concluyeron 81 cnones, todos ellos disciplinares, entre los que destacan la ms antigua referenciaeclesistica al celibato del clero, la institucin de vrgenes consagradas a Dios (uirgines Deo sacratae), laprohibicin del uso de imgenes, y del culto imperial, la regulacin de matrimonios, bautismos, ayunos,excomuniones, enterramientos, vigilias, la obligacin de asistir a misa80 Gnosticismo: Conjunto de corrientes sincrticas filosfico religiosas que, durante los siglos I IIIllegaron a confundirse con el cristianismo. Tena carcter inicitico. Segn esto, ciertas doctrinas secretas deJesucristo slo podan ser reveladas a una lite de iniciados, afirmaban que el simple hecho de conocer esossecretos provocaba la salvacin automtica, siendo el llevar una vida cristiana algo secundario. Era dualista.La materia y el espritu no estaban ligados. El mal perteneca a la materia mientras que la salvacin slopoda producirse en el espritu. Segn esto Cristo no poda ser Dios y hombre a la vez ya que la materia esel anclaje y el origen del mal. Para ellos el cuerpo de Jesucristo era algo slo aparentemente material. Unade las corrientes gnsticas propona que Cristo no era divino, sino humano, y que su ministerio fue levantado,adoptado, por la divinidad.Tambin propona una jerarqua espiritual. Dios era perfecto y su propia perfeccin impeda que se relacionasecon otros seres. Es inmutable e inaccesible. El mundo fue creado por el Demiurgo, culmen de la degeneracinprogresiva de la materia y, por lo tanto, del mal. Por su carcter dualista propona tambin una jerarquahumana. En la cima estaban los iniciados, entre los que predominaba el espritu. Por debajo estaban loscristianos, de alma sensible, que pueden salvarse utilizando la gua de los iniciados; por ltimo estn los seresen los que predomina el cuerpo y que, por lo tanto, no alcanzarn la salvacin. Por todo esto, el humano esautnomo para salvarse a s mismo: o por la }.Esta corriente fue fundada por Simn Mago o de Gitta, citado en Hechos 8: 9 24:


FRANCISCO JOS LAMAS NOYA vir autem quidam nomine Simon qui ante fuerat in civitate magus seducens gentem Samariae dicens esse sealiquem magnum, cui auscultabant omnes a minimo usque ad maximum dicentes: hic est virtus Dei quaevocatur Magna adtendebant autem eum propter quod multo tempore magicis suis dementasset eos. Cumvero credidissent Philippo evangelizanti de regno Dei et nomine Iesu Christi baptizabantur viri acmulieres, tunc Simon et ipse credidit et cum baptizatus esset adherebat Philippo videns etiam signa etvirtutes maximas fieri stupens admirabatur. Cum autem audissent apostoli qui erant Hierosolymis quiarecepit Samaria verbum Dei, miserunt ad illos Petrum et Iohannem qui cum venissent oraverunt pro ipsis utacciperent Spiritum Sanctum nondum enim in quemquam illorum venerat sed baptizati tantum erant innomine Domini Iesu. Tunc inponebant manus super illos et accipiebant Spiritum Sanctum. Cum vidissetautem Simon quia per inpositionem manus apostolorum daretur Spiritus Sanctus obtulit eis pecuniam dicens:date et mihi hanc potestatem ut cuicumque inposuero manus accipiat Spiritum Sanctum Petrus autemdixit ad eum: pecunia tua tecum sit in perditionem, quoniam donum Dei existimasti pecunia possideri. Nonest tibi pars neque sors in sermone isto, cor enim tuum non est rectum coram Deo. Paenitentiam itaque ageab hac nequitia tua et roga Deum si forte remittatur tibi haec cogitatio cordis tui in felle enim amaritudiniset obligatione iniquitatis video te esse. respondens autem Simon dixit: precamini vos pro me ad Dominumut nihil veniat super me horum quae dixistis (Haba estado antes en ella antes un tal Simn , que ejerca lamagia, asombraba al pueblo de Samaria y se haca pasar por un gran personaje. Todos, grandes y pequeos,le prestaban gran atencin y decan: Este hombre es Dios, el que se dice Grande. Le prestaban, pues, odos,porque durante mucho tiempo los haba asombrado con sus magias. Pero cuando empezaron a creer enFelipe, que anunciaba el reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaron uno tras otro, hombres ymujeres. Por su parte, tambin Simn abraz la fe y, hacindose bautizar, se mantena de continuo al lado deFelipe y quedaba atnito al observar las seales y grandes milagros que se realizaban.Habiendo sabido los apstoles presentes en Jerusaln que Samaria haba acogido el evangelio, enviaron all aPedro y a Juan. Ellos, pues, bajaron y recitaron una oracin por ellos para que recibieran el Espritu Santo,ya que hasta entonces no haba descendido sobre ninguno de ellos, sino que slo haban sido bautizados ennombre del Seor Jess. Entonces les impusieron las manos uno a uno, y as recibieron el Espritu Santo.Cuando Simn vio que mediante la imposicin de las manos por los apstoles se reciba el Espritu Santo, lesofreci dinero, diciendo: Dadme tambin a m este poder de conferir el Espritu Santo a quien imponga lasmanos. Pedro le respondi: Perezcas t y tu dinero contigo!, ya que has credo que podras obtener el donde Dios con el oro. No hay para ti porcin ni parte en esta materia, desde el momento en que tu corazn noes recto ante Dios. Arrepintete por lo menos de esta maldad y ruega al Seor Jess que te perdoneposiblemente el pensamiento de tu mente, porque te veo esclavo de una perniciosa pasin. RespondiSimn: Rogad vosotros por m al Seor para que no me suceda nada de cuanto me habis dicho.[Traduccin de Jess Garca Tolsa. La Biblia. (Edicin dirigida por Salvatore Garofalo). Labor. 1969].Fue condenada como hereja por Ireneo de Lyon en 180 d.C.81 Montanismo: Hereja que buscaba revalidar las realidades pneumticas y escatolgicas de los primerostiempos de la cristiandad. Para los montanistas el fin del mundo estaba prximo, propona la preparacinpara este con un fuerte ascetismo (preparacin para el martirio, ayunos, xerofagia, castidad en el matrimonio,prohibicin de segundas nupcias, negativa a conceder el perdn a un cristiano bautizado). Tena un fuertecomponente proftico. Segn ellos el Espritu Santo hablaba a travs de su boca, as Montano era un nuevoParclito que continuaba la revelacin.El montanismo tuvo una rpida expansin y alcanz su cnit en el s. II. Fue muy popular en Oriente,especialmente en Asia Menor, donde resisti hasta el s. IV. Hay restos de l en Lyon en 177. Tambin hayevidencias de l en Roma y frica. Su representante ms importante, sin duda, fue Quinto Sptimo FlorenteTertuliano.82 Donatismo: Originaria del norte de frica, esta hereja explicaba que slo un religioso de vida intachablepoda impartir los sacramentos. Esto iba directamente contra los clrigos que haban apostatado durante laspersecuciones de Diocleciano. Fue condenada en el Concilio de Arls en 314 y eliminada de la iglesia en 412por el emperador Honorio, aunque sigui existiendo en el norte de frica hasta la invasin rabe en el sigloVII.83 Novacianismo: De similares caractersticas que el Donatismo. Naci en 251. Novaciano se rebel contrala disposicin de San Cornelio, obispo de Roma (marzo de 251 Junio de 255) de readmitir a los apstatasy renegados durante las persecuciones. Novaciano afirmaba que slo los puros y santos deban formar partede la iglesia. Fue elegido antipapa ese mismo ao y muri martirizado por Valeriano en 268. La iglesianovacianista se difundi por Italia, Galia, Hispania, frica y, sobre todo, por Oriente, donde fue abrazada pormltiples montanistas. Desapareci, como el Donatismo, en el siglo VII.Estas tres herejas, Donatismo, Novacianismo y Montanismo, abogaban por una mayor severidad en las



costumbres de la iglesia.84 Torres Rodrguez. Op. cit.85 Martnez Cavero, Pedro; Beltrn Corbaln, Domingo y Gonzlez Fernndez, Rafael. El Commonitoriumde Orosio. Traduccin y Comentario. Faventia: Revista de folologia clssica. N 21.1999. vol. 1.86 Presedo, F. J.; Codoer, C.; Blanco Freijeiro, A. y Elorza Guineam J. C. Historia de Espaa. RamnMenndez Pidal. Volumen II, Tomo II. Espaa Romana. 218 a,C 414 d.C. La Sociedad, el Derecho y laCultura. (Las artes y las letras). Espasa Calpe. 1991.87 Sotomayor, Manuel. El Priscilianismo. En Garca Villoslada, Ricardo. Historia de la Iglesia en Espaa. Laeditorial Catlica. 1979.88 Hingenfeld. Priscillianus und seine neuentdeckten Schriften en Zeitschrift fr wissenschaftliche Theologie.Apud. Presedo Velo y otros en op. cit.89 Kunstle. Antiriscilliana. Apud. Presedo Velo y otros en op. cit.90 Garca Villada. Historia eclesistica de Espaa. Apud. Presedo Velo y otros en op. cit.91 Lpez Caneda, R. Prisciliano. Apud. Presedo Velo y otros en op. cit.92 Barbero. El priscilianismo, hereja o movimiento social? Apud. Presedo Velo y otros en op. cit.93 Paret. Priscillianus. Ein Ref

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Orosio y las Herejías Hispanas